Japón gana cuota de mercado en EE.UU.

Los gigantes automovilísticos norteamericanos (General Motors, Ford y DaimlerChrylser) están perdiendo cuota de mercado en Estados Unidos frente a los productos de origen japonés.

Mientras que los fabricantes locales americanos se centran en medidas de venta (importantes descuentos o financiaciones jugosas); los nipones ofrecen estupendos servicios postventa (más años de garantía, por ejemplo). Y parece que al público norteamericano le agradan más los servicios postventa, por lo que las ventas de vehículos extranjeros, en especial los asiáticos, se están disparando.

La crisis por la que atraviesa la industria estadounidense se evidencia en las cifras. En 2003, se produjeron 18 millones de vehículos, pero sólo se vendieron 16,63, lo que supone un descenso del 1,1 por ciento respecto a los datos del año precedente. La cuota de mercado de GM, Ford y DC se ha colocado en un 60,2 por ciento muy por debajo del 73,7 por ciento que acumulaban allá por los años 90.

Durante el pasado año, las firmas niponas ha aumentado su cuota de mercado un 1,3 por ciento al pasar del 31,3 de 2002 al 32,6 por ciento en 2003.

Toyota (el modelo FXT en la imagen) ha liderado las ventas entre los fabricantes japoneses al colocar 1,86 millones de vehículos; tras ella se encuentran Honda (1,34 millones), Nissan (794.784) y Hyundai (400.221). Los fabricantes nipones tendrán que tener en cuenta a los europeos en esta lucha por incrementar su cuota de mercado. Los vehículos europeos también están mejor acabados y tienen mejor seguridad que los norteamericanos, es decir, son firmes rivales de los automóviles nipones. El modelo más vendido durante 2003 en Estados Unidos ha sido el Toyota Camry.