Los nuevos modelos impulsan a Fiat

Los peores momentos parecen haber pasado ya para Fiat. El consorcio italiano, sumido en una impresionante crisis económica, considera que ha solventado con éxito un peligroso año para la industria, gracias al éxito que han tenido en el mercado sus nuevos modelos. Para el grupo, es hora ya de abordar otro problema: la relación con GM, quien –supuestamente- debe comprar su división automovilística si no se revisan acuerdos ya firmados.

Agnelli no quiere ejercer la opción de venta de la firma italiana
Agnelli no quiere ejercer la opción de venta de la firma italiana

El optimismo aumenta poco a poco en el grupo automovilístico Fiat. El consorcio italiano lleva meses observando claros síntomas de recuperación económica, por lo que el presidente ejecutivo decidió salir ayer a la palestra para confirmar estos datos. Giuseppe Morchio aseguró que, durante el tercer trimestre de 2003, “la sociedad ha visto ya los signos de su indiscutible repunte, gracias al buen nivel de ventas de sus nuevos modelos".“En cuanto a las operaciones, el período que abarca de octubre a diciembre ha significado una importante mejora para nuestra economía, tanto para el conjunto del grupo como para la división Fiat Auto", afirmó Morchio. El directivo italiano recordó también que ya anunció en su día que 2003 sería un año muy difícil, sin embargo, “hemos hecho las cosas bien, ya que era complicado afrontar de antemano el fuerte peso de nuestra reducción de costes".El presidente ejecutivo del grupo añadió que, en los últimos meses de 2003, han tenido en muchas ocasiones que cambiar de estrategia por las dificultades que planteaba la industria, aunque al final, “la gran acogida del mercado a dos de nuestros nuevos modelos (el Fiat Panda y el Lancia Ypsilon) nos han ayudado a solventar con éxito el ejercicio".Morchio aprovechó su intervención pública para lanzar un mensaje a su socio General Motors, asegurando que espera alcanzar un pacto con el gigante estadounidense antes de que acabe el año. El problema se plantea por la opción de compra pendiente que el grupo norteamericano tiene sobre la marca Fiat. Dicho acuerdo se alcanzó en el año 2000, cuando GM adquirió el 20 por ciento de la compañía y se comprometió a adquirir el resto en 2004.Desde entonces, la relación entre ambas compañías se ha deteriorado hasta tal punto que, durante el pasado mes de octubre, la firma norteamericana consideró el pacto inválido por la ampliación de capital y las desinversiones a las que había hecho frente la compañía italiana.El presidente de Fiat, Umberto Agnelli, ha señalado también que espera alcanzar pronto una revisión del acuerdo con el gigante automovilístico, quien, por boca de su portavoz Sheri Woodruff, asegura que “todavía es pronto para predecir el resultado de las negociaciones entre ambos grupos". Sea cual sea la resolución final, lo que parece seguro es que el incidente no pasará a mayores, ya que la marca italiana señaló hace sólo tres días que podría “perdonar" su venta a GM si se incrementa la colaboración técnica entre ambos consorcios.