En 2004 tendremos nuevos carnés de conducir

El Gobierno quiere cambiar ya el anticuado modelo de carné de conducir que tenemos en España. Por eso, ha previsto una partida en los presupuestos generales del estado para 2004 que servirá para financiar el cambio de carnés.

Dolores de Cospedal, subsecretaria de Interior, desglosó ayer el presupuesto que el Gobierno destina al ministerio de Interior. Este gasto se incrementará un 8,2 por ciento. En esa partida, según Cospedal, se incluyen 580,92 millones para Seguridad Vial, un dinero con el que, entre otras muchas cosas, se pagará el cambio de carnés de conducir.El nuevo formato, elaborado por la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre, será una tarjeta plastificada que llevará la fotografía del titular y varias protecciones contra las falsificaciones, como datos impresos por láser. El objetivo es que estas nuevas tarjetas tengan una duración mínima de 10 años.

Para el Ejecutivo, este carné es “más moderno" y se equipara a los que se utilizan “en los países de nuestro entorno". Sin embargo, Cospedal reconoce que su implantación requerirá “un esfuerzo extraordinario" por sus características y sus gastos de fabricación y de remisión por correo a sus titulares. Como ya informó Autopista Online en su día, la DGT hace tiempo que prueba estas nuevas acreditaciones. Córdoba fue la ciudad elegida para realizar los primeros ensayos. Allí, 200 conductores utilizan desde febrero el carné “europeo". El experimento ha salido tan bien que se expandirá a todo el país.

El cambio de formato será el primer paso de las transformaciones que sufrirá el permiso de conducir en los próximos años. La mayor de ellas, sin duda, el llamado carné por puntos, que se implantará antes o después. En esta modalidad de permiso de conducir, el conductor acumula puntos cada vez que comete una infracción. Esos puntos determinarán su castigo, que puede incluir la retirada definitiva de la licencia.

La Audiencia de Barcelona ha revocado parcialmente una sentencia que condenaba a un conductor a la privación del carné de vehículos a motor y ciclomotores, permitiéndole que pueda seguir llevando estos últimos.
El acusado, que conducía borracho su coche, fue condenado, como dice el Código Penal, a una pena de “arresto de 8 a 12 fines de semana o multa de 3 a 8 meses y, en cualquier caso, privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores, respectivamente". Pues bien, esta última palabra, “respectivamente", le ha salvado. Hasta ahora se entendía que la retirada del carné afectaba a las facultades de conducir coches y ciclomotores. Sin embargo, este acusado ha recurrido la sentencia aduciendo que la palabra “respectivamente" indica que se debe quitar el carné de conducir el tipo de vehículo que conducía cuando fue multado. Es decir, como el iba en coche, que se le impida llevar coches, pero que no se le impida llevar motos. La Audiencia de Barcelona ha entendido que el Código Penal ha cometido un error gramatical y ha devuelto al protagonista de esta historia su derecho a conducir ciclomotores.