Seat León Cupra R 225 CV y Seat León TDI 130 CV

Con quince caballos adicionales, el nuevo León Cupra R suma 225 y revalida el título de su predecesor: es el Seat más potente jamás fabricado en serie. Sin sobreprecio, sin más cambio estético que el pomo de la palanca de cambios y el volante, este Cupra proporciona aún más emoción y adrenalina que su ya predecesor. Autopista Online lo ha conducido para ti.

Seat León Cupra R 225 CV y Seat León TDI 130 CV
Seat León Cupra R 225 CV y Seat León TDI 130 CV

Junto al Cupra R, Seat nos ha ofrecido también la posibilidad de conducir el León 1.9 TDi con 130 CV, motor que ya montaban el Ibiza, Córdoba, Toledo y Alhambra. A partir de su comercialización, el próximo mes de septiembre, el León será el modelo de la marca con más variantes Diesel en el mercado, ya que ofrece, además de ésta que acaba de presentar, cuatro más: el 1.9 SDi de 68 CV, los 1.9 TDi de 90 y 110 CV y el 1.9 TDi de 150 CV (también disponible con tracción a las cuatro ruedas). Esta voluntad de completar el abanico de TDi no responde sino a una clara demanda del mercado, si tenemos en cuenta que el 82 por ciento de todas las unidades del León vendidas en lo que va de 2003 tenían motor TDi.

La versión de 130 CV es gestionada por una caja manual de 6 velocidades, alcanza una velocidad máxima de 205 km/h y acelera de 0 a 100 km/h en 9,8 segundos. El chasis es el mismo que soporta los 225 CV de la versión Cupra R y sobre él se acoplan suspensiones McPherson delante y de eje semirrígido detrás. En el acabado deportivo, el Sport, se ha montado una suspensión específica, con muelles un 10 por ciento más duros y una altura de la carrocería rebajada en 10 mm. Los frenos en las dos terminaciones (Signa y Sport) son discos autoventilados de 288 mm de diámetro delante y, en el eje trasero, discos macizos de 232 mm. En conducción, este TDI más potente es agradable y progresivo, con una respuesta casi inmediata a lo que el acelerador solicita. Idóneo en los recorridos por autopistas y trazados de curvas amplias, donde destacan su aplomo y el confort de marcha que proporciona a los ocupantes, su agilidad en los tramos de carreteras más estrechas y sinuosas también es innegable. Su elevado par, de 31,6 mkg a 1.900 rpm, le permiten también gozar de buenas cifras de recuperaciones, lo que contribuye a esa percepción de rapidez de reacciones que se tiene desde el puesto de conducción. Además, con esas prestaciones, las cifras de consumo siguen siendo contenidas y prácticamente iguales que las del motor de 110 CV: 5,2 litros cada 100 km de consumo ponderado, 4,3 litros en ciclo extraurbano y 7,0 en cliclo urbano (sólo en esta última el gasto supera al del motor de 110 CV, que sólo consume 6,8 l/100 km en ciudad).Junto al Cupra R, Seat nos ha ofrecido también la posibilidad de conducir el León 1.9 TDi con 130 CV, motor que ya montaban el Ibiza, Córdoba, Toledo y Alhambra. A partir de su comercialización, el próximo mes de septiembre, el León será el modelo de la marca con más variantes Diesel en el mercado, ya que ofrece, además de ésta que acaba de presentar, cuatro más: el 1.9 SDi de 68 CV, los 1.9 TDi de 90 y 110 CV y el 1.9 TDi de 150 CV (también disponible con tracción a las cuatro ruedas). Esta voluntad de completar el abanico de TDi no responde sino a una clara demanda del mercado, si tenemos en cuenta que el 82 por ciento de todas las unidades del León vendidas en lo que va de 2003 tenían motor TDi.

La versión de 130 CV es gestionada por una caja manual de 6 velocidades, alcanza una velocidad máxima de 205 km/h y acelera de 0 a 100 km/h en 9,8 segundos. El chasis es el mismo que soporta los 225 CV de la versión Cupra R y sobre él se acoplan suspensiones McPherson delante y de eje semirrígido detrás. En el acabado deportivo, el Sport, se ha montado una suspensión específica, con muelles un 10 por ciento más duros y una altura de la carrocería rebajada en 10 mm. Los frenos en las dos terminaciones (Signa y Sport) son discos autoventilados de 288 mm de diámetro delante y, en el eje trasero, discos macizos de 232 mm. En conducción, este TDI más potente es agradable y progresivo, con una respuesta casi inmediata a lo que el acelerador solicita. Idóneo en los recorridos por autopistas y trazados de curvas amplias, donde destacan su aplomo y el confort de marcha que proporciona a los ocupantes, su agilidad en los tramos de carreteras más estrechas y sinuosas también es innegable. Su elevado par, de 31,6 mkg a 1.900 rpm, le permiten también gozar de buenas cifras de recuperaciones, lo que contribuye a esa percepción de rapidez de reacciones que se tiene desde el puesto de conducción. Además, con esas prestaciones, las cifras de consumo siguen siendo contenidas y prácticamente iguales que las del motor de 110 CV: 5,2 litros cada 100 km de consumo ponderado, 4,3 litros en ciclo extraurbano y 7,0 en cliclo urbano (sólo en esta última el gasto supera al del motor de 110 CV, que sólo consume 6,8 l/100 km en ciudad).Junto al Cupra R, Seat nos ha ofrecido también la posibilidad de conducir el León 1.9 TDi con 130 CV, motor que ya montaban el Ibiza, Córdoba, Toledo y Alhambra. A partir de su comercialización, el próximo mes de septiembre, el León será el modelo de la marca con más variantes Diesel en el mercado, ya que ofrece, además de ésta que acaba de presentar, cuatro más: el 1.9 SDi de 68 CV, los 1.9 TDi de 90 y 110 CV y el 1.9 TDi de 150 CV (también disponible con tracción a las cuatro ruedas). Esta voluntad de completar el abanico de TDi no responde sino a una clara demanda del mercado, si tenemos en cuenta que el 82 por ciento de todas las unidades del León vendidas en lo que va de 2003 tenían motor TDi.

La versión de 130 CV es gestionada por una caja manual de 6 velocidades, alcanza una velocidad máxima de 205 km/h y acelera de 0 a 100 km/h en 9,8 segundos. El chasis es el mismo que soporta los 225 CV de la versión Cupra R y sobre él se acoplan suspensiones McPherson delante y de eje semirrígido detrás. En el acabado deportivo, el Sport, se ha montado una suspensión específica, con muelles un 10 por ciento más duros y una altura de la carrocería rebajada en 10 mm. Los frenos en las dos terminaciones (Signa y Sport) son discos autoventilados de 288 mm de diámetro delante y, en el eje trasero, discos macizos de 232 mm. En conducción, este TDI más potente es agradable y progresivo, con una respuesta casi inmediata a lo que el acelerador solicita. Idóneo en los recorridos por autopistas y trazados de curvas amplias, donde destacan su aplomo y el confort de marcha que proporciona a los ocupantes, su agilidad en los tramos de carreteras más estrechas y sinuosas también es innegable. Su elevado par, de 31,6 mkg a 1.900 rpm, le permiten también gozar de buenas cifras de recuperaciones, lo que contribuye a esa percepción de rapidez de reacciones que se tiene desde el puesto de conducción. Además, con esas prestaciones, las cifras de consumo siguen siendo contenidas y prácticamente iguales que las del motor de 110 CV: 5,2 litros cada 100 km de consumo ponderado, 4,3 litros en ciclo extraurbano y 7,0 en cliclo urbano (sólo en esta última el gasto supera al del motor de 110 CV, que sólo consume 6,8 l/100 km en ciudad).