Italia quiere duplicar la inversión en infraestructuras

La situación presupuestaria de muchos países de la Unión Europea amenaza la viabilidad de los proyectos que construirán grandes rutas de comunicación transfronteriza. Para desarrollarlos, serán necesarios 500.000 millones de euros e Italia parece haber encontrado la forma de conseguirlos. En su nuevo modelo de financiación juega un papel principal el Banco Europeo de Inversiones.

El plan de financiación de infraestructuras se ha convertido en el punto fuerte del programa económico de Italia para la presidencia semestral de la UE, que asumirá el 1 de julio. Para ello, ha elaborado un proyecto que pretende elevar la participación del Banco Europeo de Inversiones en las obras públicas, según recoge el periódico “Cinco Días".

El plan intentará implicar al BEI –órgano financiero de la UE- en la subvención de infraestructuras, a las que ya destina entre 7.000 y 10.000 millones de euros anuales. Italia calcula que podrían captarse entre 50.000 y 70.000 millones con la participación de esta institución. Así, se financiarían los proyectos de comunicación transfronteriza (carreteras, ferrocarriles, aeropuertos…) e, incluso, las redes de nuevas tecnologías. El Banco avalaría las obras y, además, concedería préstamos con un plazo de 35 años. De momento, el BEI ha indicado que esta idea (que incluye la titulización de los actuales activos en infraestructuras para emitir deuda destinada a futuros proyectos) es realista, ya que parte de instrumentos financieros que se utilizan normalmente en el mercado. Por su parte, la Comisión Europea también ha considerado “positiva" la propuesta, aunque hay cierto recelo, ya que Italia se ha “adueñado" de una iniciativa sobre la que esta institución llevaba meses trabajando. De hecho, Loyola de Palacio, comisaria europea de Transportes, presentó un documento en abril en el que solicitaba la incorporación de capital privado en las grandes obras para la integración física de Europa. El BEI era uno de los organismos señalados como catalizadores para la inversión.

El Ejecutivo italiano asegura que las inversiones pueden aumentar de nuevo (actualmente no llegan al 1 por ciento del PIB comunitario, mientras que, en los años 80, eran del 1,5 por ciento) sin incrementar la deuda ni el déficit público. “Las autopistas italianas fueron financiadas, hace 20 años, directamente por el mercado, sin emplear el presupuesto público", ha recordado Tremonti.