El RACC elabora un informe sobre el mal estado de la N-II

Cruces peligrosos, asfalto muy deteriorado y estrechamientos en zonas de poca visibilidad son algunas de las deficiencias que el RACC (Real Automóvil Club de Cataluña) ha denunciado en el informe elaborado sobre la N-II. La entidad ha estudiado 98 km en Girona y la conclusión es clara: la vía presenta un nivel muy bajo de comodidad física y psicológica para los conductores.

El RACC elabora un informe sobre el mal estado de la N-II
El RACC elabora un informe sobre el mal estado de la N-II

Los representantes de los sectores económicos y políticos de Girona llevan años reclamando el desdoblamiento de la N-II. Con esta medida, se terminaría con los problemas de tráfico que arrastra esta carretera y que han sido detallados en un estudio elaborado por el RACC, en colaboración con la Cámara de Comercio de la región.La entidad automovilística ha señalado las deficiencias que presenta la vía a su paso por la provincia catalana, entre Palafolls y La Jonquera, y, entre los múltiples problemas destacados, se encuentra el deterioro del asfalto, defectuoso en un 79 por ciento del recorrido. Según el secretario ejecutivo de la Fundació RACC, Alfons Perona, el mal estado del firme se debe a la gran densidad de circulación que soporta la carretera y al elevado porcentaje de vehículos pesados que transitan por ella. Año tras año, la cifra de coches que pasan por este tramo aumenta considerablemente (5.000 automóviles diarios más desde 2001).El sector más saturado es el comprendido entre Riudellots de la Selva y Girona, donde, cada día, circulan 21.339 vehículos. De ellos, un 18,5 por ciento son pesados, aunque no llega al índice registrado entre Figueres y La Jonquera, donde el porcentaje de camiones que pasa por la carretera es del 24 por ciento (si bien la densidad de tráfico es de 11.045 vehículos diarios).Este factor influye directamente sobre la velocidad media que puede alcanzarse en los tramos. No es baja: entre Palafolls y Girona llega a los 86 km/h, aunque hay que tener en cuenta que, en un 9 por ciento del recorrido, los automóviles están obligados a circular a un máximo de 60 km/h.Otra de las consecuencias que se desprende del estudio es que la gran concurrencia de vehículos pesados dificulta los adelantamientos. En el tramo señalado anteriormente, sólo el 18 por ciento del trazado cuenta con carril para vehículos lentos. Entre Girona y Figueres este índice es aún menor, con un 9,2 por ciento de zonas en las que es posible rebasar a los camiones, y especialmente sangrante es el caso del trayecto comprendido entre Figueres y la frontera francesa, en el que sólo hay dos kilómetros de carriles lentos.

El problema de la alta densidad de tráfico podría solucionarse, apunta Perona, liberando de peaje la A-7 “para los vehículos pesados a ciertas horas (las nocturnas) y en ciertos trayectos". Esta disposición podría adoptarse, al menos, mientras no se acometa el desdoblamiento de la vía. Sin embargo, esta medida no es suficiente para resolver todas las deficiencias de esta carretera, que necesita, según el RACC, "mejorar su gestión a corto plazo y afrontar una inversión importante para acabar con sus irregularidades". “De no ser así –añade Perona- podría convertirse en un freno para el desarrollo de las comarcas de Girona". Así, habría que solucionar los giros a la izquierda de Riudellots de la Selva, Caldes de Malavella, Mallorquines, Medinyá, Vilafreser, Vilamalla, Báscara y Pontós. Para realizar estas maniobras, hay que reducir bruscamente la velocidad, provocando una disminución de la seguridad en la carretera. Por si esto fuera poco, hay puntos en los que la vía pasa de tres a dos carriles en zonas de poca visibilidad, como cambios de rasante y curvas. Además, el RACC propondrá al Ministerio de Fomento mejorar la señalización horizontal y vertical y cambiar las protecciones metálicas de los puentes por otras de hormigón.Tras presentar todos estos fallos, el informe llega a una conclusión clara: la N-II es una vía con “un nivel muy bajo de comodidad física y psicológica para los conductores", un factor que contribuye a elevar el riesgo de accidente. De hecho, el tramo analizado se cobró, entre 1999 y 2001, 89 víctimas mortales, 232 heridos graves y 900 leves. Uno de los puntos más conflictivos está en Banys de la Mercé, donde han fallecido 26 personas en los últimos 10 años. “Es necesario invertir urgentemente en esta vía para evitar que el número de muertes siga aumentando cada año", ha asegurado Perona. De la misma opinión son los vecinos de la zona, cuyas protestas han conseguido que el Ministerio de Fomento lleve a cabo una serie de reformas que reducirán la siniestralidad y que deberían terminar antes del verano.Los habitantes de la región no son los únicos que demandan mejoras en la vía: la Diputación de Girona aprobó un manifiesto para reclamar al gabinete gestionado por Francisco Álvarez-Cascos el desdoblamiento “urgente" de la carretera. Dicho documento ha recibido más de 50 adhesiones y el apoyo de 22 ayuntamientos, 2 consejos comarcales y 28 empresas, informa el diario “La Vanguardia". Además, todos aquellos ciudadanos que deseen aportar su granito de arena a la causa pueden entrar en la página web www.nacional2.org (en el enlace) y apoyar la propuesta.