Anfac pide medidas para frenar la competencia del Este

Los países del Este de Europa, con una mano de obra muy barata, preocupan a la industria automovilística española, que teme que parte de la producción de las marcas continúe trasladándose a estas naciones. Ante esta situación, la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles (Anfac) ha solicitado a la clase política medidas que frenen la competencia.

Anfac pide medidas para frenar la competencia del Este
Anfac pide medidas para frenar la competencia del Este

El presidente de Anfac, Jesús Ruiz Beato, ha pedido a la clase política una serie de medidas para frenar la competencia de los países del Este en el sector automovilístico, recrudecida tras las peticiones de adhesión de nuevos miembros a la Unión Europea.

Ruiz Beato aprovechó un acto organizado por la Asociación de Profesionales del Automóvil (ASEPA) para señalar que estas disposiciones estarían destinadas a mantener la estructura productiva actual, ya que –según ha reconocido- será casi imposible que Europa Occidental aumente, a lo largo de los próximos años, su capacidad fabril, que se está desplazando -lentamente aún- hacia el Este. Las razones de este traslado obedecen, principalmente, a una mano de obra más barata (el coste de la hora de trabajo es de 4,21 euros, mientras que la media de los Quince se sitúa en 22,70 euros) y desregulada. Asimismo, estas naciones se encuentran más cerca de los centros logísticos y de decisión, lo que facilita la aplicación de las resoluciones adoptadas por las marcas.

Para luchar contra estos factores, el presidente de Anfac ha abogado por atraer hacia España una producción de vehículos de gama más alta que los manufacturados actualmente. Sin embargo, también ha reconocido que se trata de “un objetivo que no está en nuestra mano", ya que las decisiones en esta materia se adoptan en otros países. Las peticiones que Ruiz Beato ha realizado a la clase política son más controlables y se centran en mejorar las infraestructuras, abaratar las energías, perfeccionar la formación de la mano de obra y llevar a cabo un mayor esfuerzo inversor en I D. “Resulta bastante descorazonador que hayamos dedicado a Investigación y Desarrollo sólo un 0,9 por ciento del PIB (Producto Interior Bruto), mientras que la media europea es del 1,9 por ciento, la de EEUU es del 2,7 por ciento y la de Japón llega al 3 por ciento", ha asegurado.Las reclamaciones de Ruiz Beato también se han extendido al plano laboral, para el que ha solicitado una superación de la actual confrontación entre los sindicatos y las fábricas, así como la preeminencia de los convenios de empresa. Además, es fundamental una regularización de la temporalidad, “pues la industria del automóvil la necesita", al ser una actividad muy sensible a la estacionalidad y a los vaivenes de la demanda.Por otra parte, el presidente de Anfac también ha señalado que es inexcusable potenciar el mercado interior: aunque una exportación del 80 por ciento de la producción es positiva, no puede compensar una rentabilidad del 1,2 por ciento en las redes de concesionarios.Asimismo, con el fin de aumentar la competitividad, insistió en la tradicional reivindicación del sector, que pretende eliminar el Impuesto de Matriculación que grava las ventas de los automóviles a partir de determinadas cilindradas, y defendió un nuevo Plan Prever, “sin cicatería" por parte de la Administración, que incentive la demanda.

Con estas medidas, España puede recuperar terreno y convertirse en una industria capaz de luchar con las del Este, que también tienen “puntos débiles": la ausencia de proveedores, parques automovilísticos pequeños, una gran incertidumbre económica y conceptos institucionales alejados de los que existen en los países desarrollados.