Menos de la mitad de los niños viajan de manera correcta

La Dirección General de Tráfico, el Real Automóvil Club de España y la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil acaban de hacer público un estudio acerca de la efectividad de los sistemas de retención infantil (SRI). Según el documento, más de la mitad de los niños menores de un año no viajan debidamente sujetos y la mayoría de los niños de más de cuatro años viajan sin retención alguna.

Menos de la mitad de los niños viajan de manera correcta
Menos de la mitad de los niños viajan de manera correcta

La conclusión más importante del estudio es que los sistemas de retención infantil (SRI) “son, con diferencia, más eficaces que los cinturones de seguridad para adultos a la hora de prevenir daños a los ocupantes". El estudio ha sido elaborado con los datos procedentes de diversos accidentes ocurridos en vías interurbanas en los que ha habido 1.011 víctimas infantiles (menores de 12 años) y ha sido financiado por la Foundation for the Automobile and Society, por el RACE (Real Automóvil Club de España), por la DGT (Dirección General de Tráfico) y por la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil. Según el análisis de los datos, del total de las colisiones, la mayoría –un 44 por ciento- fueron choques frontales. Un 23 por ciento de los accidentes se saldaron con un vuelco y el 33 por ciento restante se reparte entre otros tipos de colisión (trasera, por ejemplo). La forma de colisión tiene mucha importancia a la hora de determinar la efectividad o no del sistema de retención, en caso de que se haya utilizado, claro.Utilizando correctamente el sistema de retención no se garantiza que el niño salga ileso de un accidente y se ha comprobado que la colisión más dañina es la que se produce de manera lateral. La posición del niño dentro del vehículo también es un punto importante que se ha observado en este estudio. La plaza que más ocupan los menores es el asiento trasero derecho (37 por ciento de las ocasiones), el trasero izquierdo (27 por ciento) y el trasero central (21 por ciento). Del análisis de estas posiciones en relación con las consecuencias posteriores en los accidentes, se concluye que la más segura de todas las plazas es la central trasera y la más peligrosa, la delantera derecha. Sin embargo, lo más importante del estudio es la medición de la efectividad de los sistemas de retención infantil (SRI). Los datos hablan por sí solos. Cuando el SRI se usa de manera correcta, la probabilidad de que un niño salga ileso de un accidente es 2,6 veces mayor que si el pequeño no fuera correctamente “anclado". De hecho, los niños que no llevan sujeción sufren 2,5 veces más lesiones graves que los que sí van sujetos y 1,8 veces más que aquellos que, aunque van sujetos, no van adecuadamente colocados. En definitiva, los niños sin ningún tipo de sujeción sufren 5 veces más lesiones mortales que los que sí van adecuadamente sujetos. Cifras aparte, lo más importante del estudio es que se pone de manifiesto que un 56,3 por ciento de los niños involucrados en los accidentes estudiados no llevaban ningún tipo de sistema de retención infantil. Del 46,3 por ciento restante, que sí estaban sujetos por estos dispositivos, un 10,5 por ciento estaban anclados de manera incorrecta o iban sentados en el regazo de otra persona. Esta es otra de las cuestiones que se ha analizado en el estudio. Según los datos recogidos, en los vehículos de alta gama y monovolúmenes se aprecia que se utilizan en mayor porcentaje y de manera correcta los SRI. En el otro polo opuesto, se encuentran las furgonetas y los todo terrenos, vehículos en los que los pequeños van prácticamente “sueltos". Las lesiones más graves o incluso la muerte de los niños se deben, principalmente, a que éstos salen despedidos del habitáculo tras el accidente. Cuando las lesiones que sufren los niños son leves, éstas se deben, casi siempre, a la rotura de los cristales o a golpes contra otros ocupantes o contra elementos que van sueltos dentro del coche. 1. Sólo el 37 por ciento de los niños accidentados usaban sistemas de retención infantil corrrectamente colocado. Esto supone un motivo de alarma, por lo que es necesaria una concienciación de la sociedad en este aspecto.
2. Pese a que la colisión frontal es el tipo de accidente más frecuente, el más dañino para los pequeños es siempre el vuelco.
3. Del total de los niños “protagonistas" del estudio, sólo un 21 por ciento salió ileso del siniestro.
4. Menos de la mitad de los bebés de menores de un año viajan correctamente sujetos dentro del vehículo.
5. La mayoría de los niños de más de cuatro años viajan sin retención.
6. Sólo un 10 por ciento de los niños que deberían utilizar los cojines elevadores –entre 4 y 6 años- los utilizan. a) Cuando el SRI se usa de forma adecuada, la probabilidad de que un niño resulte ileso es 2,6 veces superior a la probabilidad de resultar ileso cuando no se usa el SRI.
b) El efecto protector del SRI se aprecia menos cuando se tienen en cuenta las lesiones leves, pero es más evidente a medida que se consideran lesiones cada vez más graves.
c) Los niños sin sujeción sufren 2,5 veces más lesiones graves que los que van adecuadamente sujetos y un 1,8 por ciento más que los niños inadecuadamente sujetos.
d) Los niños sin sujeción sufren 5 veces más lesiones mortales que los niños adecuadamente sujetos.
Fuente: Estudio RACE, DGT y Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, 2003.Las recomendaciones que proponen los autores del estudio son claras y se dirigen al fomento del uso de los SRI –probada su efectividad- y a la disminución de su uso incorrecto. Para ello es necesario que los padres estén informados acerca de cómo es más seguro que viajen sus hijos.

La DGT ha publicado un folleto titulado “Guía dirigida a padres sobre dispositivos de retención infantil dentro del automóvil" en el que se detallan los diferentes sistemas de sujeción y la mejor manera de utilizarlos. Otras recomendaciones para evitar la alta siniestralidad en los niños están dirigidas a los fabricantes de automóviles: almohadillado interior del vehículo, cristales laterales laminados, airbags de cortina, etc.

Y todo ello antes de que la Unión Europea apruebe la obligatoriedad de instalar estos sistemas de retención en todos los vehículos. Esto podría ocurrir dentro de unos meses, pero su implantación progresiva podría llevar varios años.