Occidente pide más petróleo

La Agencia Internacional de la Energía pide a la Opep que aumente su oferta de petróleo y contribuya así a calmar los precios del petróleo si estalla la guerra con Irak. A día de hoy, las tarifas están casi fuera de control y amenazan con arruinar la recuperación económica occidental. Ayer, el barril de Brent cotizó por encima de los 33 dólares.

Occidente pide más petróleo
Occidente pide más petróleo

La bolsa de Londres, referencia para Europa, negoció petróleo a 33,70 dólares por barril, un nivel que no se alcanzaba desde el año 2000. En Nueva York la jornada fue un poco más tranquila, pero el precio sigue rozando los 37 dólares por barril. La media de precios de la Opep, quizá el índice más estable, llega ya a los 32,12 dólares, otro escalón preocupante.

Los precios se mantienen así fuertes y propensos a las subidas inmediatas, animados por la posible guerra con Irak, que ayer se veía mucho más cercana en los mercados financieros y petrolíferos. Ante esta situación de volatilidad, y ante ese riesgo cierto de guerra, la Agencia Internacional de la Energía, la AIE, se ha planteado escenarios muy preocupantes para las economías occidentales. En estos momentos se considera que hay cierta escasez de crudo en los mercados, pero, si hay guerra, Irak dejará de exportar más de dos millones de barriles diarios, con lo que la escasez será mucho más acusada.

Para paliar los efectos terribles que esta falta de crudo puede tener en la economía de Occidente, la AIE se ha dirigido a la Opep en términos casi de súplica. Su director, Claude Mandil, ha pedido al cártel que, si empieza la guerra, utilice todo su poder extractor para aumentar su oferta de crudo e impedir que los precios enloquezcan.
La Opep ya dijo hace unos días que estaba dispuesta a cubrir la ausencia de Irak, pero la petición de la AIE va más allá: quieren que produzcan todo lo que esté en su mano para que la abundancia de petróleo neutralice los efectos de la guerra. La petición de Mandil, hecha directamente al ministro saudí del Petróleo, Ali al-Naimi, tiene algo de desesperada. Al-Naimi ha contestado con buenas palabras y coincide con Mandil en que la Opep debe poner a trabajar sus máquina al máximo para evitar que Occidente tenga que abrir sus reservas estratégicas.

Sin embargo, lo que no dice Al-Naimi es que no todos los países petroleros están dispuestos a satisfacer los ruegos de la AIE. Algunos coquetean con la posibilidad de reducir incluso la oferta para que los precios hagan más daño a los países que quieren atacar a Irak.
Entre estas dos posturas parece situarse el grueso de la Opep, que la semana próxima se reúne en su sede de Viena para analizar la situación y, posiblemente, aumentar su oferta diaria. Si lo hacen, será en medio millón de barriles cada día, como marca su mecanismo automático de ajuste de precios (si el índice supera los 28 dólares más de tres semanas, se añade medio millón de bidones). Sin embargo, los mercados se temen que esos 500.000 barriles no sean suficientes para frenar la escasez a corto plazo.