Fiat busca heredero

Las banderas de Fiat ondean a media hasta en la mítica fábrica de Mirafiori, pero los mercados internacionales no entienden de lutos. Las acciones de la compañían reciben con optimismo la llegada de Umberto Agnelli al frente de la firma y los analistas aseguran que la venta de la división automovilística está mucho más cerca.

Fiat busca heredero
Fiat busca heredero

Giovanni Agnelli, ''il Avoccato'', había marcado la vida económica, social y política de la Italia surgida tras la Segunda Guerra Mundial. Era el hombre que motorizó el país, el gran patrón de la industria, un apasionado de la Fórmula Uno, que deja una Fiat agonizante. La empresa es arrastrada por su división automovilística a una de las peores crisis de su centenaria historia. Sin embargo, muerto el patrón, se han puesto a remar los marineros. Umberto Agnelli, su hermano, acaba de ser nombrado nuevo presidente de Giovanni Agnelli, la sociedad familiar que controla el 30,4 por ciento de Fiat. Como primera medida, el nuevo padrino ha realizado un aumento de capital de 250 millones de euros, una cantidad insignificante para la zozobrante compañía, pero que, según su actual presidente, Paolo Fresco, significa "un claro compromiso con el futuro de Fiat".

Sin embargo, los analistas creen que, con Umberto, la división automovilística está más cerca de la venta. Mientras que el fallecido Giovanni defendía la sección de autos -auténtico corazón de una compañía que se ha diversificado en multitud de negocios, desde el aeronáutico al editorial-, Umberto era partidario de su disolución. Los turineses incluso aseguran que a éste "los automóviles no le han interesado nunca".

Sin embargo, el peso de Fiat en la sociedad italiana no es nada desdeñable: el mismo obispo encargado de la despedida de Giovanni recordó en el funeral que "la empresa no sólo debe ser relanzada. También debe permanecer ligada a Turín". Pero, lejos de patriotismos, hay que tener en cuenta que tampoco es ningún chollo. General Motors, que ya posee un 20 por ciento de la misma y que en 2004 tiene derecho a comprar el resto, ha asegurado que la muerte del patrón no cambia los planes de cooperación: todo dependerá de la cotización en bolsa de las acciones. Se rumorea que podría aumentar en un 10 por ciento su participación en los próximos meses.Hasta ahora, Umberto era el actual presidente de Ifil y vicepresidente de Ifi, las financieras de la familia, pero en mayo podría convertirse en presidente de Fiat, dejando a un lado a Paolo Fresco. La familia también estaría dispuesta a desembolsar 900 millones de euros para no ver diluida su participación en el Grupo.

Los Agnelli parecen reforzarse a la espera de un auténtico heredero y éste ya está asignado. Se trata de John Philipp Elkann, el nieto de Giovanni, un joven de 27 años cuyo perfil guarda muchas similitudes con el de su abuelo.

Diversos empresarios también están dispuestos a jugar su particular baza de patriotismo para hacerse cargo de la compañía. Entre los mejor situados, se encuentran Roberto Colannino, ex presidente de Telecom Italia, y Emilio Gnutti, un financiero cercano al primer ministro italiano, Silvo Berlusconi.