Menos accidentes, seguro más barato

El Puente del Pilar en las carreteras se ha saldado con la muerte de 54 personas en 45 accidentes de tráfico, una cifra sensiblemente inferior a la del mismo período del año pasado, cuando hubo 72 víctimas mortales, aunque entonces hubo un día más de fiesta.

Balance 2005: 4.442 personas mueren en las carreteras
Balance 2005: 4.442 personas mueren en las carreteras

El Puente del Pilar finalizaba ayer con importantes retenciones en los accesos a las grandes ciudades, sobre todo a la entrada de Madrid.No obstante, mucho más grave es la pérdida de vidas en accidentes de tráfico y estas jornadas festivas, llenas de desplazamientos por carretera, han sido menos luctuosas que los años anteriores.Valgan como ejemplo los puentes del Pilar de los años 2005 y 2004, cuando el número de fallecidos fue superior. Así, el año pasado perdieron la vida al volante 72 personas en 51 accidentes, aunque no hubo operación especial al caer la festividad en mitad de la semana y no haber puente en los colegios. Mientras, en 2004, el número de víctimas ascendió a 68 en un total de 51 siniestros. A pesar de que la Dirección General de Tráfico puso especial énfasis en aumentar la precaución en las carreteras secundarias, fue en este tipo de vías donde se produjeron más siniestros y más víctimas mortales. Ya lo advirtió el subdirector de Circulación de la Dirección General de Tráfico, que señaló que a la DGT le preocupa mucho este tipo de vías, pues “tienen muchos kilómetros y menos tráfico que las grandes autovías, pero concentran gran número de accidentes".Con todo y eso, los índices de siniestralidad siguen bajando paulatinamente en los últimos meses, lo que ha provocado que la DGT pronostique que el precio de los seguros del automóvil bajará el próximo año. Según los datos que maneja la propia Dirección General de Tráfico, las tarifas de las polizas no han aumentado apenas desde hace seis años y, desde 2005, están estancadas a causa del descenso de la siniestralidad. No obstante, las compañías de seguros han advertido que el de la siniestralidad no es el único criterio que se toma para calcular lo que deben pagar los asegurados por sus coberturas. Intervienen otros factores, como la gravedad de los siniestros, los costes que se derivan de ellos o el índice de riesgo.