Lorenzo supera a Stoner, relegado a la tercera plaza por Crutchlow

El español Jorge Lorenzo (Yamaha YZR M 1) superó al australiano Casey Stoner (Honda RC 213 V) en el tercer y último entrenamiento libre del Gran Premio de Catar de MotoGP, en el que el campeón del mundo se vio incluso superado por el británico Cal Crutchlow (Yamaha YZR M 1).

Stoner, que había mandado en las dos primeras sesiones de pruebas libres no pudo rebajar más que en apenas tres décimas de segundo sus registros precedentes y ello le acabó relegando a la tercera posición.

Así se cumplieron las previsiones menos optimistas para los pilotos de Honda en este inicio de campeonato, pues han visto como se confirmaba el buen rendimiento de sus rivales de Yamaha, con tres pilotos en las cuatro primeras posiciones.

Lorenzo se acercó a escasamente una décima y media de segundo del récord del circuito, que tiene desde 2008 el propio Casey Stoner en 2008, pero quedando lejos del récord de vuelta más rápida, que hizo ese mismo año, cuando todavía se empleaban neumáticos de calificación -mucho más blandos que los actuales y de apenas dos o tres vueltas de duración-, el propio Jorge Lorenzo con un espectacular 1:53.927.

De esta manera se confirmaron los peores augurios, puesto que prácticamente todos los pilotos de Yamaha, salvo el estadounidense Ben Spies, que se fue por los suelos durante la última tanda de pruebas libres y no pudo mejorar más sus tiempos, acabaron en lo más alto de la clasificación.

Spies perdió adherencia en su moto y cayó como anteriormente le había sucedido a Dani Pedrosa, si bien en el caso del estadounidense tuvo que dar por válido el registro de la segunda tanda de pruebas libres, que le relegó a la novena posición, justo por detrás de los pilotos de Ducati.

Pedrosa, que arañó más de medio segundo a su anterior tiempo acabó en la quinta posición, pero a más de ocho décimas de segundo del campeón del mundo de MotoGP en 2010 y con dos décimas de ventaja sobre su compatriota Héctor Barberá.

El español se convirtió en el mejor piloto de Ducati, por delante de los oficiales Nicky Hayden y Valentino Rossi y a los que aventajó en casi tres décimas de segundo.

Barberá, que no dispone del mismo chasis de evolución que el estadounidense y el italiano parece adaptarse muy bien a su nueva montura de la escudería italiana Pramac y en cada entrenamientos que ha realizado ha logrado rebajar sensiblemente sus mejores tiempos para acabar sexto a escasamente ocho décimas de segundo de Lorenzo.

Peor lo tienen tanto Hayden como Rossi, que se encuentra ya a más de un segundo del español y que por ello deberán buscar la manera de lograr que su Desmosedici GP12 equipada con chasis de aluminio sea lo más efectiva posible de aquí al domingo, aunque el propio Rossi no se mostró demasiado confiando en sus posibilidades antes de comenzar los primeros entrenamientos.

El alemán Stefan Bradl (Honda RC 213 V), campeón del mundo de Moto2 en 2011 y piloto de la escudería del italiano Lucio Cecchinello en 2012, fue décimo en la tabla de tiempo, con apenas veinte milésimas de adelanto sobre el español Álvaro Bautista, como él piloto de una Honda.

La primera posición entre las nuevas motos CRT fue para el francés Randy de Puniet, quien rodó por los suelos camino de lograr su objetivo en esa particular clasificación.

El francés regresó renqueante a su taller pero con el mejor tiempo entre las motos derivadas de la serie, 1:58.261, a casi tres segundos de Lorenzo si bien esa diferencia en un circuito tan rápido y largo como es Losail, 5.380 metros, no resulta demasiado amplia.

Tras Randy de Puniet acabó el estadounidense Colin Edwards con la BMW Suter, mientras que Aleix Espargaró, compañero del francés sobre la otra ART de la escudería de Aspar, fue decimoséptimo e Iván Silva, al manillar de la FTR Kawasaki de la escuadra Avintia Blusens fue decimonoveno.