Lexus GS 450h

Prestaciones de V8, consumo de TDI, emisiones de cigarrillo de farmacia y lujo de Mercedes. Así es el GS 450h, la nueva apuesta híbrida de Lexus, un coche que también destaca por su comodidad y por su alto nivel de equipamiento. Ya está a la venta por 74.600 euros, un precio elevado, pero al nivel de la competencia del segmento.

Lexus GS 450h
Lexus GS 450h

En la práctica es el dispositivo de reparto de la potencia el que hace que funcione sólo el motor eléctrico cuando arrancamos el coche o circulamos a bajas velocidades, que se combinen ambos en circulación convencional -tanto para mover el vehículo como para cargar las baterías, aunque en aceleraciones a fondo se suspende esta última función- y que el propulsor de gasolina se apague en deceleraciones y frenadas, siendo la energía cinética la encargada de recargar la batería. Nos encontramos con un vehículo de 345 CV y un par motor mínimo de 28 mkg, que es el que proporciona el motor eléctrico. Las prestaciones de este GS 450h son comparables a las de una berlina de representación de gasolina, el consumo es similar al de un Diesel de inferior potencia, las emisiones CO2 -186 gramos por kilómetro- resultan muy parecidas a un vehículo con motor de gasóleo y menos caballos, mientras que las emisiones de NOx son prácticamente inexistentes. Así, acelera de 0 a 100 km/h en 5,9 segundos (un segundo más que un Porsche 911 Carrera 4S Coupé de 355 CV), su velocidad máxima es de 250 km/h y su consumo de combustible combinado es de 7,9 litros cada 100 km (como un A6 3.0 TDI -225 CV-). Con estos datos, recibe el honor de ser el híbrido más rápido del momento. Puestos a los mandos de este "limpio" GS 450h, la sensación es la de ir conduciendo un coche convencional, sin que el hecho de que sea híbrido condicione nuestra manera de conducirlo: que necesitamos potencia, pisamos el acelerador y la obtenemos sin demora aparente. El comportamiento dinámico de la berlina japonesa es exquisito. El confort de marcha que transmite a los ocupantes en carreteras abiertas está a la altura -o por encima, incluso- del que pueden proporcionar sus rivales de Mercedes, Audi o BMW, y en las zonas de curvas no se aprecian movimientos "raros" -incluso en cambios de apoyos bruscos sobre asfalto en mal estado- del tren trasero gracias a un reparto igualitario de pesos entre los dos ejes y a un trabajo encomiable de la suspensión multibrazo trasera. Esta comodidad se completa con un rodar bastante sigiloso en conducción normal y casi silencioso a velocidades bajas -por debajo de 40 km/h-. En el interior se respira un ambiente de lujo y de muy buen acabado, al igual que sus hermanos de gama. Lo que diferencia a este GS 450h del resto es la sustitución del cuentarrevoluciones por un reloj que informa de la entrega de potencia del conjunto en cada momento. Además, a través de la pantalla multifunción se puede ver el rendimiento de la batería, el nivel de carga de la misma y los consumos que se obtienen. Hay, no obstante, dos apartados a los que poner "peros" en este GS 450h. El primero es el de los frenos. A la espera de contar con una unidad de pruebas y verificar las distancias de frenado, las sensaciones que nos ha transmitido el equipo de frenos no son las mejores. La respuesta a la acción sobre el pedal nos ha dado la impresión de que no es inmediata y, cuando este elemento actúa, lo hace con una mordiente exagerada. La segunda "mancha" en este casi perfecto conjunto es la del maletero. La colocación tras los asientos traseros de la batería condiciona el espacio de carga y de qué manera. Si la gama GS no destacaba por su maletero (430 litros oficiales frente a los 500 litros de media de sus rivales), este GS 450h sólo anuncia 280 litros, lo que lo sitúa a la altura de lo que ofrecen algunos utilitarios del mercado. Imaginativamente, Lexus ha sabido reaccionar y ofrece, de serie en España, un conjunto de cinco maletas Samsonite diseñadas para caber de manera perfecta en el maletero.El Lexus GS 450h ya está disponible en los concesionarios españoles a un precio de 74.600 euros, únicamente 1.225 euros más caro que el GS 430, que cuenta con 62 CV menos. Además, para nuestro país el nivel de equipamiento es soberbio, no se echa de menos nada, pues tiene todo. La lista sería casi interminable, pero destacamos el climatizador bi-zona, llantas de aleación de 18 pulgadas, multitud de airbags –incluidos los de rodillas para conductor y copiloto-, control de crucero adaptativo, control de estabilidad, sistema de seguridad pre-colisión, faros inteligentes, suspensión variable, navegador, equipo de sonido Mark Levinson, sistema de párking con cámara trasera y la tapicería de cuero . Me gusta que empiecen a proliferar los vehículos híbridos. Es una clara apuesta por la tecnología y el medio ambiente, aunque, por desgracia, todavía sólo accesible para determinadas economías. El principal trabajo de Lexus es concienciar a sus potenciales clientes de las virtudes de este tipo de vehículos y quitar los prejuicios existentes. Que sirva de ejemplo el caso del RX 400h, que, según la marca, está funcionando muy bien comercialmente hablando.

Respecto al GS 450h, lo bueno es que va mejor que sus hermanos de gama, con unas prestaciones muy buenas y un consumo y unas emisiones muy bajas. La pena es que el maletero queda bastante reducido. El precio es otro de sus atractivos, aunque cueste 74.600 euros, pues es sólo un dos por ciento más caro que el GS 430, teniendo mayor potencia y equipamiento.