Roland Krueger entró como presidente de Infiniti con un cometido claro: vender 500.000 unidades en el horizonte de marzo de 2017. El encargo fue hecho por el mismísimo Carlos Ghosn, presidente de la alianza Renault-Nissan y, aunque en Infiniti las cosas no van mal, la realidad es que Krueger aún está lejos de conseguir el ambicioso objetivo.
A pesar de ello, las ventas de la firma van en constante crecimiento: el mes pasado fue el mejor de su historia, creciendo un 12 por ciento hasta alcanzar las 19.900 unidades vendidas. El acumulado del año ha supuesto un crecimiento del 7 por ciento.
Estados Unidos es el país del que proceden la mayor parte de las alegrías de Krueger, pues es en ese mercado donde se dan dos tercios de las ventas de Infiniti. Pero Krueger es consciente de que hay que ampliar mercado. También ‘miramos China y nos vamos a centrar en Europa Occidental’, afirma. En cuanto a Europa, ‘hay un mercado de entre 950.000 y un millón de coches premium al año y creo que la marca tendrá potencial para crecer con dos modelos que se están teniendo gran aceptación, el Q30 y el QX30’.
El presidente de Infiniti incide en que la marca debería ser más conocida en el viejo continente, pero ello requiere poner automóviles en la calle. El crecimiento ha sido vertiginoso en lo que va de año, un 155 por ciento, pero ‘tenemos un volumen bajo’, dice Krueger, de 13.200 unidades. Por ello ‘estamos expandiendo nuestra red. Tendremos ente 120 y 140 concesionarios más’.
Lo llamativo de esta expansión es que no la está llevando a cabo de la mano de Nissan, su matriz, sino de Renault. Krueger se reunió con Stephan Müller, vicepresidente del Grupo Renault, ‘para ver las oportunidades que nos da la fuerte red de Renault en la región para expandir la de Infiniti’.
Con respecto a España, el presidente de Infiniti mostró su satisfacción con el acuerdo cerrado con Bergé Automoción para importar y comercializar sus modelos en nuestro territorio. ‘Trabajamos con ellos desde hace varios años en España -también en Chile- y estamos muy satisfechos con el retorno de la inversión. Confiamos plenamente en las posibilidades de crecimiento en España’.
Por otra parte, preguntado por la posibilidad de que se le asigne algún modelo Infiniti a la fábrica de Nissan en Barcelona, Krueger no dejó dudas: ‘ahora mismo no tenemos previsto fabricar ninguno de nuestros modelos en la planta de Barcelona’.
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