Hace 125 años que nació Ferdinand Porsche, un revolucionario del motor

El 3 de septiembre de 1875 nacía Ferdinand Porsche, un hombre que cambió radicalmente el mundo del motor. A sus manos se han debido diseños que han superado al tiempo y a las modas, como el Volkswagen Escarabajo o el Mercedes SKK, además de los coches que llevan su nombre y su sello.

Para esas fechas, el genial inventor está recluido por las fuerzas aliadas francesas y estadounidenses. Cuando sale de su cautiverio, Porsche ya tiene en la mente el modelo 356 cabrio, el primer coche que lleva únicamente la marca Porsche. Se basaba en el Volkswagen, pero era un deportivo en toda regla.Los años sucesivos son febriles. Los proyectos se suceden y Ferdinand Porsche sólo piensa ya en modelos deportivos y en la competición. Su primer éxito llega en 1956, con la victoria de un 356 en las 24 Horas de Le Mans. Para él, sin embargo, ya era demasiado tarde. Había muerto en enero de ese mismo año, muy poco antes de que su coche triunfara.Sus herederos tomaron el relevo y siguieron adelante con la línea que había marcado Porsche en el último tramo de su vida: fabricar coches sólidos, de mecánicas intachables y pensados para la deportividad. De ese impulso creador salen obras de arte como el 911 en 1963, un mito de la automoción mundial que ha marcado el discurrir de la compañía hasta nuestros días. Antes habían aparecido sucesivas versiones del 356, el Super 90 y el Spyder 550. Después del 911 vendrían sus seguidores, el Targa, el 944, el 928... Así hasta el último vástago, el Cayenne. Hoy, 125 años después de su nacimiento, el espíritu de Ferdinand Porsche sigue inspirando a los diseñadores de la marca en su trabajo diario. De sus pupitres y ordenadores todavía salen máquinas que enamoran a los aficionados y triunfan en las carreras.