Guilad Shalit llega a su pueblo entre la alegría de cientos de israelíes

El soldado israelí Guilad Shalit, que esta mañana fue puesto en libertad por Hamás cerca de la frontera entre Egipto e Israel, llegó hoy a su pueblo de Mitzpé Hilá, en el norte de Israel, donde fue recibido por centenares de personas.

El soldado llegó procedente de la base militar de Tel Nof, en el centro del país, a bordo de un helicóptero de la Fuerza Aérea de Israel, que aterrizó en el helipuerto del parque industrial de Tefen, cercano al pequeño pueblo del norte de Israel donde reside su familia.

Cientos de personas se congregaron a lo largo del trayecto de unos pocos kilómetros desde el parque industrial Tefen hasta el domicilio de los Shalit en Mitzpe Hila.

El joven, acompañado por sus padres, recorrió en automóvil esa distancia entre el ondear de banderas israelíes y los gritos y cánticos de bienvenida de los congregados, que arrojaron también flores al vehículo que les transportaba.

La llegada a su pueblo natal se retrasó debido a que el soldado sufrió un ligero desvanecimiento durante el vuelo desde la frontera de Gaza hasta la base militar de Tel Nof.

Tras un intensivo examen médico en la base militar, los facultativos determinaron que podía viajar de nuevo en helicóptero hasta la casa familiar de Mitzpé Hilá, una pequeña población cercana a la frontera con el Líbano.

Shalit había aterrizado a primera hora de la tarde en la base militar de Tel Nof, donde se reencontró con su familia por primera vez tras más de cinco años de cautiverio en poder de Hamás.

Allí se reunió con sus padres, Noam y Aviva, su hermano Yoel y su hermana Hadas, además de su abuelo Zvi, que viajaron a primera hora del día a Tel Nof para recibirle.

Shalit llegó a la base en un helicóptero de la Fuerza Aérea israelí procedente del campamento militar de Amitai, próximo a la franja de Gaza, donde tuvo ocasión de ducharse y despojarse de la vestimenta entregada por sus captores.

En Amitai se vistió con uniforme militar, pudo hablar por teléfono con sus familiares y se le hizo entrega de unas gafas, las primeras que recibe desde que fuera hecho cautivo en junio de 2006.

Shalit perdió sus gafas graduadas cuando fue capturado y su familia había pedido que se le facilitasen unas lo antes posible.

Los medios locales informaron de que en las revisiones médicas que se le han practicado en las instalaciones militares por las que ha pasado se ha podido comprobar que su salud física es buena, aunque presenta signos de delgadez y su rostro es pálido.

El soldado fue entregado por la mañana por las autoridades de Hamás en Gaza a representantes del Comité Internacional de la Cruz Roja y funcionarios de la inteligencia egipcia en el paso fronterizo de Rafah, en el sur de la franja en cumplimiento del acuerdo alcanzado con el Gobierno israelí para el canje del soldado por más de un millar presos palestinos.