Pese a estas creencias, la compañía ha asegurado que los neumáticos de invierno son útiles cuando se dan temperaturas por debajo de 7°, y no sólo cuando hay nieve o hielo de forma habitual. En este sentido, ha indicado que "existe una gran diferencia en cuanto a seguridad de la conducción dependiendo de si se utilizan cubiertas de invierno o de verano".
Así, con unas cubiertas de invierno, conduciendo a 80 km/h sobre la nieve, la distancia de frenado es de 70 metros, 40 metros más corta que con neumáticos de verano debido a los tipos de compuestos de la banda de rodadura, la tecnología de láminas especiales, la forma de las zonas de contacto y el dibujo específico de la banda.
Los compuestos de polímeros, más suaves y por tanto más flexibles, utilizados en la banda de rodadura de los neumáticos de invierno, les permiten funcionar mejor con temperaturas bajas y sobre el asfalto congelado. Utilizan mezclas de caucho y sílice que permiten mantener la flexibilidad de la goma incluso en temperaturas muy bajas.
Por otro lado, el dibujo de los neumáticos de invierno, está diseñado para una óptima dispersión el barro y el agua, tan rápido y eficazmente como sea posible. Si nos fijamos en su dibujo, pueden verse varios elementos, tales como ranuras especialmente diseñadas y complejas láminas tridimensionales que se encargan de "morder" la nieve y el hielo suave cuando aparece sobre el asfalto.
Además, los neumáticos de invierno son una alternativa a las cadenas y la Dirección General de Tráfico, conocedora de sus beneficios, ya los recomienda en sus campañas invernales como una alternativa a las cadenas. "Parar en carretera en plena nevada a montar las cadenas puede ser peligroso, sobre todo si se ha hecho de noche y hay poco espacio en el arcén", señala Goodyear.
Asimismo, la compañía también ha desmentido que los neumáticos de invierno sean "un gasto económico importante". De hecho, ha indicado que los neumáticos de verano, utilizados en condiciones invernales, sufren un mayor desgaste y, por tanto, se reduce su vida útil. Así, si se cambian los neumáticos de verano por los de invierno cuando es el momento y se guardan adecuadamente, ambos juegos de cubiertas prolongarán su vida útil y supondrán un ahorro para el conductor.
