Ganvam: no al Impuesto de Transmisiones

La Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor (Ganvam) ha solicitado a las comunidades autónomas que rebajen los tipos del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP) o, en su defecto, dilaten el periodo de exención de su pago de uno a dos años, ya que la crisis impide vender los vehículos sujetos a este impuesto antes de que se cumpla el plazo estipulado de un año.

Más de 100 millones de coches en 2018
Más de 100 millones de coches en 2018

La Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor (Ganvam) ha solicitado a las comunidades autónomas que rebajen los tipos del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP) o, en su defecto, dilaten el periodo de exención de su pago de uno a dos años, ya que la crisis impide vender los vehículos sujetos a este impuesto antes de que se cumpla el plazo estipulado de un año.Ganvam recuerda que, en la actualidad, los profesionales deben hacer frente a un pago fiscal superior a los 70 millones anuales por el aumento de los tiempos de 'stock' de los vehículos.La patronal de vendedores explica que los concesionarios o compraventas que recogen el vehículo usado de un particular para su reventa tienen la obligación de pagar un tipo del 4 por ciento por el ITP, aunque están exentos de liquidar este tributo si revenden el vehículo dentro del año siguiente a la fecha de su adquisición. No obstante, la crisis económica, las restricciones al crédito y el empobrecimiento de las economías domésticas están provocando una dilatación de los plazos de venta de vehículos usados que impide, en numerosas ocasiones, acogerse a la exención en el ITP. Según datos de Ganvam, el promedio de permanencia en 'stock' de los automóviles de más de dos años de antigüedad se sitúa actualmente en torno a los 150 días, una media que frecuentemente engloba ventas con demoras superiores a un año, lo que deriva en pagos a las haciendas regionales por valor de hasta 70 millones de euros. Ante esta situación, la patronal insiste en la necesidad de dilatar de manera temporal la exención en el pago del ITP hasta los dos años de plazo, al menos mientras la crisis del sector de automoción continúe. Asimismo, propone reducir la cuantía del impuesto, puesto que las comunidades autónomas tienen la potestad de modificar el tipo impositivo aplicable, establecido por la normativa estatal en el 4 por ciento.En esta dirección se ha movido ya la Comunidad de Madrid, donde desde el 1 de enero de 2010 se aplica a los concesionarios y compraventas un tipo del 0,5 por ciento cuando no consiguen revender el vehículo en el plazo de un año y se ven obligados a liquidar el impuestoEsta posición choca con la mantenida por las comunidades de Asturias y Cantabria, cuyo ‘afán recaudatorio’ se ha traducido en el incremento del tipo impositivo del 4 por ciento al 8 por ciento para todos aquellos turismos o todoterrenos de más de 15 caballos de potencia fiscal. Asimismo, en Cataluña se exige desde el pasado mes de junio una carga fiscal del 5 por ciento para todos los medios de transporte en general.La patronal subraya la importancia que tendría para el sector la dilatación del ITP, dado que actualmente el 42 por ciento de las ventas de usados corresponden a ventas de profesional a particular, lo que supuso un volumen de 660.000 unidades en el año 2010. De ellas, alrededor de un 20 por ciento supera el año de 'stock' y, por tanto, son susceptibles de pagar el ITP si sobrepasan el año desde su adquisición hasta su venta.