Gallardón: "Madrid será de los peatones"

El Ayuntamiento de Madrid ha inaugurado el I Congreso Internacional “Los Ciudadanos y la Gestión de la Movilidad" con un anuncio del alcalde Alberto Ruiz-Gallardón: "el tráfico ha descendido un 7,7 por ciento en dos años, por tanto, Madrid será de los peatones". El encuentro se celebrará entre el 25 y el 27 de septiembre en el Museo de la Ciudad de Madrid.

Gallardón: "Madrid será de los peatones"
Gallardón: "Madrid será de los peatones"

En las últimas décadas, la movilidad urbana ha aumentado en la mayoría de las ciudades españolas, lo que supone un incremento de los desplazamientos por sus calles. Estos movimientos ocasionan una serie de efectos negativos, como el aumento de la congestión y los atascos o el incremento del consumo energético y su repercusión en el medio ambiente. Por tanto, conseguir una mejor movilidad urbana que facilite nuestra calidad de vida será uno de los objetivos fundamentales de este congreso.En el acto de inauguración del I Congreso Internacional de la Movilidad, el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, proclamó que "Madrid será de los peatones". El alcalde se remitió a los datos ofrecidos por la Concejalída de Seguridad, según los cuales el tráfico ha descendido un 7,7 por ciento en los últimos dos años, y atribuyó este descenso a que se ha fomentado el uso del transporte público.

Asimismo, el edil añadió que Madrid cuenta con 3,2 millones de habitantes y no es fácil gestionar los desplazamientos de una población tan itinerante.

Sin embargo, frente a quienes creen que la reforma de la M-30 causará problemas para el tráfico, Gallardón negó que sea así y señaló: "queremos recuperar el Madrid de los años 50, con grandes bulevares arbolados, un claro ejemplo es el proyecto de remodelación del eje Prado-Recoletos". Además, el concejal de Seguridad y Servicios del Ayuntamiento de Madrid, Pedro Calvo, añadió que “hay que conseguir que los ciudadanos no huyan de su ciudad ante la falta de movilidad, y por esto hay que ofrecerles una mejor infraestructura que facilite una mayor calidad de vida".Hay que partir de una idea: el incremento de la movilidad urbana obliga a tomar medidas, como fomentar el uso del transporte público, habilitar espacios para el peatón, ofrecer vías alternativas y espacios de circunvalación y distribución del tráfico, favorecer el uso de otros medios de transporte, conseguir una distribución de mercancías ágil, etc. En definitiva, conseguir una movilidad sostenible, más respetuosa con el entorno, que, a su vez, sea capaz de generar nuevos espacios. El futuro del transporte urbano debe abordar los efectos de la congestión del tráfico actual. Para esto, se deben desarrollar distintas estrategias, con un enfoque que propicie el uso del transporte público, la bicicleta, la moto, el caminar y el uso compartido de automóviles privados como medios óptimos y sostenibles de desplazamiento.Lograr estos objetivos y estrategias exige enfoques integrados que combinen la planificación del transporte, del medio ambiente y del espacio, por lo que se deben implicar los ciudadanos, asociaciones, profesionales de los sectores afectados y demás agentes sociales, con el fin de generar una conciencia más solidaria. En la primera jornada de hoy cabe destacar la propuesta presentada por Anthony May, profesor de Ingeniería del Transporte de la Universidad de Leeds (Reino Unido). Bajo el título “Peaje por congestión en el Reino Unido", el profesor May ha querido demostrar cómo el plan sobre el cobro de peajes en el centro de Londres se ha convertido en un sistema efectivo para descongestionar el centro neurálgico de la ciudad. Aunque la iniciativa sufrió varios procesos de aceptación y rechazo, los estudios siguen su curso y la opinión pública cada vez está más de acuerdo con este sistema. La iniciativa ha consistido en cobrar una tarifa variable (de 1 a 8 libras) para los coches que entran al centro de la ciudad entre las 7:30 horas y las 18:00 horas. Estas tarifas no se aplican a los autobuses urbanos o residentes, que pueden conseguir un descuento adicional. En definitiva, May aboga por seguir con los objetivos del llamado “curacaoprojet", un plan para reducir la congestión de tráfico, favorecer el medio ambiente, aumentar los ingresos e incrementar la seguridad.

El problema de este plan reside en la "transferibilidad", es decir, la posibilidad de transferir este modelo a otros países. Por tanto, en primer lugar, se necesita un profundo análisis del modelo a aplicar, se debe prestar una gran atención a la campaña informativa sobre el transporte público a los ciudadanos, se deben mejorar los medios de desplazamiento para conseguir un transporte urbano sostenible y se debe reorganizar la ciudad para poder establecer los puntos de cobro del peaje en un entorno adecuado para ello. Estocolmo ha sido el ejemplo del éxito de este sistema, ya que, la semana pasada, los propios ciudadanos aprobaron por referéndum la aplicación del cobro de peajes. El Congreso Internacional “Los Ciudadanos y la Gestión de la Movilidad", que reúne a 350 expertos de 23 países, se celebrará entre el 25 y el 27 de septiembre en el Museo de la Ciudad de Madrid (C/Príncipe de Vergara, 140). Más información en www.congresomovilidad.comSegún un informe elaborado por el Observatorio de Movilidad Metropolitana (un organismo del Ministerio de Medio Ambiente dirigido por Andrés Monzón), "los madrileños son los que más utilizan el transporte público por motivos de trabajo".

El diseño de las grandes ciudades está cambiando los modos de transporte. Cada vez se crean más barrios alejados del centro de la capital, por lo que se crea una necesidad de uso del transporte público o coche en detrimento de poder ir andando. Las conclusiones de estudio demuestran que Madrid, Zaragoza y Barcelona son las ciudades con mayor porcentaje de uso del transporte público, de hecho, se ha aumentado un 40 por ciento en los últimos tres años. Sin embargo, Monzón señala que "el defecto de Madrid es no apostar por por el transporte público en superficie, como habilitar más carriles de autobús, más carril bici y no poner tranvías, como en otras capitales europeas.