La familia, el coche y uno más

Viajar en coche con una mascota supone algo más que abrir el portón trasero y hacer subir al perro, al gato, a la tortuga o a la serpiente que cada uno tenga como animal preferido. Significa una serie de cuidados exclusivos, una preparación exhaustiva del trayecto y la aplicación del sentido común en un apartado en el que, desgraciadamente, en nuestro país existe un vacío legal enorme.

Es el artículo más común entre los propietarios de perros, aunque está indicado para todo tipo de mascotas. Se utiliza para separar el espacio destinado al animal de las plazas delanteras. Existen varias marcas en el mercado y, por regla general, su adquisición no supone un elevado desembolso económico. Normalmente, su montaje es bastante sencillo y está basado en el mismo sistema, aunque alguna de estas redes distingue entre coches con vierteaguas en el techo y vehículos que no disponen de este accesorio. Para los primeros el enganche se realiza desde el exterior del habitáculo (desde el vierteaguas) y en los segundos, desde el interior. Su precio oscila entre las 2.000 y 3.000 pesetas. Permiten abrir la ventanilla y evitar la deshidratación provocada en el interior de la cabina sin peligro físico para el perro.Al igual que las redes mejoran la seguridad en el interior de la cabina y protegen al conductor de una súbita escapada de la mascota hacia la parte delantera. Salvo algunas excepciones, no están disponibles para berlinas. Las mejores son las ofertadas por los fabricantes, ya que no rompen con la estética interna del vehículo y están construidas a la medida del mismo. Se instalan en el espacio libre existente entre los asientos delanteros y el techo de la cabina. Obligatorios en algunos países, como Estados Unidos o Inglaterra, en España se comercializan en tres tamaños, que se sujetan a través de un anclaje a los cinturones traseros. El modelo más pequeño permite al perro ir sentado en la plaza trasera. Normalmente están construidos en nylon y, al igual que el cinturón de seguridad de los pasajeros, salva muchas vidas. Sus precios comienzan en las 3.500 pesetas. Como su nombre indica, es una bolsa que permite cargar con el perro sin necesidad de utilizar transportines o cajones. Aunque no es propiamente un accesorio para el coche, puede ser utilizado en viajes no muy largos. El artículo más conocido de todos los destinados a viaje es válido para todo tipo de mascotas, desde gatos y perros hasta tortugas y palomas. Consiste en una caja portátil de variadas dimensiones dependiendo del tamaño de la mascota, lo suficientemente amplio para que el animal se encuentre cómodo en su interior. Puede estar fabricado en plástico, metal o mimbre y cuenta con rejillas a modo de respiradero. Los más pequeños van acolchados en su interior. La marca más conocida es Vari Kennel, presente en casi todo el mundo y que sólo está disponible en pequeño tamaño. Cuenta con una parrilla de ventilación en cromo plateado, puerta de acero y cremalleras de nylon.