Las enseñanzas de los pilotos

Los cursos de conducción están de moda. La seguridad manda en la carretera y, por fin, esta idea comienza a calar entre los automovilistas, que quieren aumentar su habilidad al volante. Entre las escuelas existentes, nos hemos decidido por PTC, situada en La Pastoriza (Lugo). Con Sergio y Diego Vallejo -piloto y copiloto, respectivamente, en el Nacional de Rallyes de Asfalto-, hemos realizado diversos ejercicios que pueden sacarnos de situaciones comprometidas.

Las enseñanzas de los pilotos
Las enseñanzas de los pilotos

Hay que levantarse muy temprano para llegar al Circuito de La Pastoriza (Lugo), pero nos han hecho una propuesta que no podemos rechazar. Vamos a realizar un curso de conducción con dos monitores de lujo: los hermanos Sergio y Diego Vallejo, participantes en el Nacional de Asfalto y con una amplia experiencia en el mundo de los rallyes. Ambos forman parte de la escuela PTC (Perfeccionamiento y Técnicas de Conducción), dirigida por Antonio Solórzano. Lleva casi nueve años impartiendo clases sobre una disciplina tan importante que puede salvar vidas: técnicas de pilotaje y su aplicación en el día a día.Acompañado por sus socios, Álvaro e Isaac, y por un plantel de instructores que, en su mayoría, provienen del mundo de la competición, Solórzano ha creado una “academia" en la que no faltan las últimas tecnologías. Las clases teóricas se llevan a cabo en un aula dotada de una pizarra electrónica, sobre la que proyectan una serie de explicaciones desarrolladas mediante un programa informático. La postura correcta de conducción ("aquella en la que te sientas cómodo", señala Álvaro), cómo deben moverse las manos al volante o cómo afrontar una curva son algunas de las nociones en las que insiste ante el grupo de alumnos. Hay de todo tipo: aficionados a los rallyes, personas que quieren dar sus primeros pasos en la competición y otras que, simplemente, buscan incrementar su seguridad. "Las clases pueden llegar a hacerse algo pesadas, pero es necesario subrayar los conceptos básicos. Además, si alguien pregunta, hay que resolver sus dudas con la mayor precisión posible", señala Álvaro. A nadie parece importarle que las explicaciones se alarguen, ya que están plagadas de anécdotas vividas en diferentes carreras. Pero llega el momento de saltar a la pista y poner en práctica lo que acaban de mostrarnos.Aunque hay quien sigue intentando "demonizar" las carreras de coches, lo cierto es que muchas de las técnicas que se aplican en la competición pueden servir, bien utilizadas, en el día a día. "Se trata de no caer en el 'macarrismo' al enseñar seguridad", apunta Solórzano. Con estas consignas en mente, nos ponemos al volante de los Alfa Romeo que emplea PTC (el acuerdo con el fabricante italiano se suscribió hace 4 años) y un monitor sube a nuestra derecha. En otras escuelas de conducción es habitual que el instructor se quede fuera, apuntando los errores mediante un sistema de radio. Pero los responsables de estos cursos creen que los fallos se ven mejor desde dentro. Además, los alumnos sienten más confianza con un profesional a su lado, que puede analizar sus actitudes y corregirlas con precisión en el momento.La pista, diseñada para competiciones de kárting y sobredimensionada, ya es bastante retorcida, pero las cosas se complican con las "chicanes" artificiales que han creado los monitores mediante conos. En estas condiciones, comenzamos nuestra andadura. Por el momento, no hay dificultades importantes: se trata de completar el circuito trazando las curvas correctamente, poniendo atención en las zonas de entrada y salida y no acelerando o frenando a destiempo. Después, cuando cambiemos de coche y de instructor (de esta forma, cada uno de ellos podrá evaluarnos e intercambiar impresiones con los demás), tendremos que realizar las vueltas un poco más deprisa, con el fin de "meternos en líos". Lo más complicado está por llegar.A media mañana, un sistema de riego moja parte del circuito, con el fin de convertirlo en una pista deslizante. "No hace falta pulir el asfalto, ya verás cómo resbala", comenta Álvaro. Y es cierto, lo que obliga a reflexionar a todos los alumnos. Cuando la velocidad de entrada en la curva es mayor de la aconsejable, el sobreviraje o el subviraje están asegurados. La aplicación de la teoría y los acertados consejos de nuestros acompañantes nos han permitido llevar los coches "por lo negro" y controlarlos después de un par de sustos y alguna que otra "excursión" fuera de la pista. Da que pensar, ya que son las mismas condiciones que podemos encontrarnos en cualquier carretera; sólo hace falta que llueva un poco para que el asfalto deslice y el conductor se vea en una situación comprometida.Terminamos las clases prácticas con Sergio Vallejo a nuestro lado, completando nuevas vueltas al circuito mientras escuchamos sus explicaciones sobre las inercias y cómo actúan éstas en un vehículo. "Es como una bañera llena de agua. Cualquier movimiento hace que el agua y, por consiguiente, el peso, se desplace. Hay que procurar que dicho desplazamiento no se haga con movimientos bruscos. Así, podremos controlar el coche", añade. Esta técnica depurada es la que le ha permitido estar entre los primeros puestos del Campeonato de España de Rallyes de Asfalto durante varios años seguidos.Sólo tienes que ponerte en contacto con los responsables de PTC, que te informarán sobre los cursos que ofrecen, sus precios y las fechas disponibles. Puedes llamar a los siguientes teléfonos: 981 174 114 / 650 367 521.