El pasado 8 de enero se cumplieron 80 años del nacimiento del 'Rey del Rock'. Es por tanto 2015 un año que parece señalado para Elvis Presley y, por ello, no es casualidad que justo ahora salga a subasta una de las joyas de su garaje. Se trata de su Stutz Blackhawk de 1971 y ha sido la famosa casa de subastas de las estrellas, Julien, la que lo pone a disposición de aquellos coleccionistas que puedan permitirse el capricho. Su precio rondará, según estimaciones, el medio millón de dólares, lo que traducido a euros serán unos 474.000.
Entregado a Elvis el 9 de septiembre de 1971 en su mansión de Beberly Hills, este Stutz Blackhawk del 71 es uno de esos sueños sobre ruedas super exclusivos. No en vano, de esa generación en concreto, la primera, sólo se produjeron 26 unidades. En realidad este Blackhawk fue el segundo que tuvo Presley en menos de un año. El primero, lo adquirió a finales de 1970, adherido a un acuerdo publicitario que incluía que el coche se exhibiese en el Salón del Automóvil de Los Ángeles y que Elvis posara con él para unas fotos durante la muestra norteamericana. Frank Sinatra, que también se enamoró de este coupé biplaza, rechazó los requisitos al preguntar por él, pero Elvis aceptó. Pocos meses después, el Rey del Rock destrozaba su Stutz Blackhawk cuando un coche chocaba contra él en un accidente. La marca le ofreció dejárselo como nuevo, pero Presley lo rechazó y se compró uno nuevo, esta vez en color negro. Tras la muerte del músico, seis años después, el Stutz Blackhawk acabó en manos de su buen amigo, el doctor Elias Ghanem. Uno de los pocos que 'heredó' uno de los muchos, y queridos, automóviles que tuvo Presley.
Ghanem falleció en 2001 y ahora el Blackhawk pasará a nuevo dueño una vez se realice la subasta, que tendrá lugar los próximos 15 y 16 de mayo en el Hard Rock Cafe de Nueva York. Ahora mismo, y durante una semana, el Stutz Blackhawk de Elvis se exhibe por Julien Auctions en el Palms Casino Resort de Las Vegas.
Sobre el Stutz Blackhawk de 1971...
Este coupé biplaza es el único coche producido que cuenta con parabrisas dividido y carece de parachoques trasero. Además, disfruta de comodidades que hoy vemos normales que en los años 70 no lo eran, como elevalunas eléctricos, cierre centralizado o volante regulable en altura. En su interior, también encontramos una tapicería en cuero Connolly.
El Stutz de Elvis mantiene su motor original, el Rocket 455 de origen Pontiac, con 7,4 litros y ocho cilindros en uve de 360 CV de potencia. El coche está como nuevo: apenas tiene 33.000 millas, es decir, unos 53.000 kilómetros.
