El “coche volador”, más cerca

¿Os imagináis poder volar con el coche y con ello evitar los atascos de la carretera? Pues este sueño podría estar más cerca de lo que imagináis. Un estudiante estadounidense ha desarrollado un prototipo del que ya se admiten pedidos.

Carl Dietrich es un estudiante de 28 años que acaba que acaba de ganar un premio de 30.000 dólares, concedido por la prestigiosa universidad de Massachusetts, por un invento que, hasta la fecha, parecía impensable.Se trata del “Vehículo Aéreo Personal"<(b> o, como lo llama Dietrich, Transition, un “coche volador" diseñado para mejorar la vida de aquellas personas que tengan que desplazarse habitualmente entre 150 y 650 kilómetros. Dietrich encuentra justificación para su invento. “Si viajas entre 150 y 650 kilómetros", afirma, “probablemente optaras por conducir a menos que tu trayecto se desarrolle entre dos aeropuertos. Conducir está bien, pero puedes tardar medio día en alcanzar tu destino y estás sujeto a los caprichos del tráfico. Al mismo tiempo, las aerolíneas comerciales son efectivas para viajes de más de 650 kilómetros, pero no prestan mucha atención el mercado de desplazamientos pequeños. Por ello, el “Vehículo Aéreo Personal" abre un gran número de posibilidades. Ofrece flexibilidad para adaptarse al horario de los viajeros"El Transition tiene el tamaño de un todo terreno, pesa 600 kilos y está preparado para circular por cualquier tipo de suelo y, gracias a sus alas plegables, también para volar, con una autonomía de 800 kilómetros y una velocidad máxima de 190 km/h. El único pero es que necesita una pista de 450 metros para despegar. Su conductor sólo debe poseer una licencia de aviación deportiva para manejarlo y, junto a él, sólo podrá viajar una persona más.El equipamiento del Transition destaca por su cargamento tecnológico. Incorpora un ordenador que calcula el centro de gravedad –algo vital a la hora de volar-, sistema de navegación GPS, airbags y cámaras para salvar los ángulos muertos cuando las alas están plegadas. Lo sorprendente es que Dietrich, a través de la empresa que ha creado, ya ha comenzado a recibir pedidos de este vehículo. Ya son más de 75 pilotos y diversas compañías las que se han mostrado interesadas e, incluso, han ofrecido una fianza para reservarlo. El precio, unos 115.000 euros, no parece demasiado elevado si cumple lo que promete. Volar con el coche no parece ahora tan lejano en el tiempo.