La gasolina, sin tasas, como la Coca-Cola

La gasolina sin impuestos, ¿más barata que la Coca-Cola? Esta es la frase con la que nos sorprende Antonio Brufau, presidente de Repsol, en una entrevista en el diario económico Expansión.

Conducción económica
Conducción económica

Y la verdad es que tiene razón. Si un litro de Coca Cola vale en una tienda en torno a 70 céntimos y el litro de gasolina de 95 octanos ronda los 1,2 euros y tenemos en cuenta que la mitad de lo que pagamos de ese litro son impuestos (el 32,7 por ciento corresponde al impuesto de hidrocarburos, más el céntimo sanitario, más el IVA), las cuentas sí le salen al señor Brufau: un litro de gasolina cuesta 60 céntimos.El máximo mandatario de la petrolera señala que, aunque se intente buscar un culpable de esa subida (la especulación, la OPEP o la creciente demanda de países como China), no hay un único responsable. Brufau enumera varias causas, como ‘la dificultad creciente en extraer crudo en condiciones óptimas de rentabilidad en los países productores’, sobre todo por la presión fiscal a la extracción, que en determinadas regiones puede alcanzar al 90 por ciento, Además, según Brufau, hay otros mitos que tienen que soportar las petroleras. En los países consumidores son las petroleras las que cargan con las críticas del ciudadano cada vez que la gasolina sube de precio en la estación de servicio. En ese momento, nadie se acuerda de los elevados impuestos que se pagan en cada litro de combustible, y que Brufau resume en la entrevista de Expansión: 'si no existieran impuestos, un litro de gasolina o de gasoil costaría más barato que el agua mineral, o que la Coca-Cola'.Al mismo tiempo, el consumo de gasóleo de automoción se recuperó durante abril y creció un 7,5 por ciento, después de que en marzo cayera casi un 10 por ciento, en lo que representó el primer descenso de la demanda de este carburante de los últimos seis meses, según datos del Boletín Estadístico de Hidrocarburos que recoge Europa Press.En concreto, el consumo de gasóleo de automoción se situó en 2,19 millones de toneladas en abril, con un repunte del 7,5 por ciento. En el primer cuatrimestre el crecimiento se situó en el 1,3 por ciento, con 8,42 millones de toneladas, mientras que en los últimos doce meses la progresión alcanza el 3,3 por ciento, con 25,87 millones de toneladas.Por su parte, la demanda de gasolinas de automoción sigue su tendencia a la baja como consecuencia del proceso de 'dieselización' del parque móvil, al descender un 5,5 por ciento en abril (520.000 toneladas), un 6,6 por ciento en los cuatro primeros meses del año (2,02 millones de toneladas) y un 4,1 por ciento en los últimos doce meses (6,58 millones de toneladas).