Chrysler, ''nacionalizado'' europeo

No podía ser en otro escenario. Chrysler presentará en Ginebra a los compradores europeos su Crossfire, el primer vehículo que ha conseguido hermanar totalmente todas las ramas del grupo DaimlerChrysler.

Este coupé ya se conoce en Norteamérica, pero ahora comienza su fabricación en serie, concretamente en la planta que Karmann posee en Alemania. Este coupé ha recibido el 40 por ciento de sus componentes, incluido su motor y suspensiones, de Mercedes. El propulsor, en concreto, tiene 3,2 litros de capacidad, seis cilindros en V y rinde 215 CV y se combinará con una caja de cambios manual de seis velocidades o con una automática de cinco. La estética del Crossfire llamó la atención desde que se exhibió como prototipo. El director general de Chrysler, Wolfgang Bernhard, reconocía que decidió su producción masiva sólo con ver las caras de la gente que contemplaba los bocetos. Lo más característico de esta rompedora imagen es su decorativa "espina dorsal" que recorre el vehículo hasta el tubo de escape. Eso sí, se ha suavizado algo su look y ahora presenta una ventana trasera más amplia y un alerón trasero oculto, que se despliega cuando se circula a más de 80 km/h. El Crossfire es ya una realidad. Más de medio año ha transcurrido desde que Chrysler anunció su producción en serie. Por fin, tras pasar por varios salones como coche de concepto, el coupé deportivo de la firma americana aparece tal y como será comercializado a comienzos de 2003. Salvo ligeros retoques, la versión presentada hoy como primicia mundial enLos Ángeles puede considerarse como la definitiva. El atractivo vehículo es fruto de la colaboración entre las firmas Mercedes y Chrysler, ambas pertenecientes al Grupo DaimlerChrysler, pero, sobre todo, una apuesta personal de los antiguos directivos de la primera compañía y ahora presidente y director ejecutivo de la segunda, Dieter Zetsche y Wolfgang Bernhard.

Su importancia radica no sólo en que el 39 por ciento de sus componentes, incluido su motor y suspensiones, han sido prestados por Mercedes, sino también en que ha sido el primer proyecto de los dos directivos alemanes desde que rigen los destinos de Chrysler.

Se trata por tanto de la punta de lanza del consorcio formado en 1998, del primer vehículo de DaimlerChrysler construido como tal, tratando de aprovechar las sinergias de grupo. Así, será fabricado en Alemania, concretamente en la planta del especialista Karmann, donde también se ensambla en Mercedes CLK, pero utilizando la enseña y el diseño de la marca americana.
El Crossfire definitivo mantiene varios de los "toques de distinción" que caracterizaban al coche de concepto que le preludió en varios salones internacionales. Lo más significativo es la decorativa "espina dorsal" que recorre el vehículo desde la parrilla hasta el tubo de escape. También se han incluido ligeras modificaciones para su explotación comercial, tales como una ventana trasera más amplia y un alerón trasero oculto, que se despliega cuando se circula a más de 80 km/h.

El motor pertenece a Mercedes y tiene 3,2 litros de capacidad, seis cilindros en V y rinde 215 CV. Combinará con una caja de cambios manual de seis velocidades o automática de cinco.

Tras la admiración desatada en el pasado Salón de Nueva York, Chrysler ha decidido seguir adelante con la fabricación en serie del PT Cruiser descapotable. Este modelo, que se montará a partir de 2004 en la fábrica mexicana de Toluca, a las afueras del Distrito Federal, sólo se presentará con carrocería de dos puertas y cuatro plazas. Desde el pasado 13 de abril, el centro de convenciones Jacob K. Kavits de Nueva York acoge la edición 2001 del New York International Show, que este año presenta como novedades más destacadas el lanzamiento oficial de la carrocería convertible del PT Cruiser y la puesta de largo del sedán de lujo de Nissan, 2002 Infiniti.
Desde su comercialización el pasado año, el Chrysler PT Cruiser se ha convertido en la punta de lanza, especialmente en los Estados Unidos, de la firma norteamericana, acechada por los fantasmas de las pérdidas y de las controversias. Finalmente, tras unos meses de reflexión y recuperación, la casa Chrysler ha decidido continuar con su estrategia comercial y, por fin, lanza el tan esperado concepto de PT Cruiser convertible en el salón neoyorquino.
La gama Infiniti de berlinas de lujo mantiene su importancia en el seno de la firma Nissan Motor y buena muestra de ello es el lanzamiento de la nueva versión comercial 2002 I35, que se erige como el modelo más exclusivo de la familia. El constructor también exhibe estos días su nueva berlina de tamaño medio Nissan Ultima, que pretende hacer sombra a otros vehículos japoneses del mismo tipo, como el Honda Accord o el Toyota Camry.
Asimismo, también se han presentado al público los nuevos Lincoln MK 9, representante de los coupés estadounidenses de lujo, y Acura 2002 RSK, perteneciente al segmento de los biplaza, que sustituirá en julio al buque insignia de la marca, el Integra.