Bajas incentivadas en GM y Delphi

Unos 40.000 trabajadores de General Motors y de Delphi han aceptado las jubilaciones anticipadas y despidos voluntarios que han propuesto ambas empresas, para hacer frente a un descenso en las ventas, que les fuerza a reducir la producción.

General Motors quería reducir su plantilla en 30.000 personas durante los dos próximos años. El acogimiento voluntario al plan de reestructuración pone las cosas bastante más fáciles al fabricante automovilístico. Dicho plan prevé una indemnización de 35.000 dólares para los empleados de que lleven trabajando en la compañía más de 30 años, además de la pensión y las prestaciones sanitarias. Si los empleados han pasado menos tiempo, recibirán 140.000 dólares, pero sin derecho a pensión ni a otras prestaciones sociales.

En Delphi, los cálculos indicaban que deberían acogerse a este plan unas 10.000 personas y, precisamente, es la cifra que se maneja. El fabricante de componentes para automoción está en suspensión de pagos desde el pasado otoño y quiere cerrar o vender la mayoría de sus instalaciones de producción en Estados Unidos (21 de sus 29 plantas).

El presidente de General Motors, Rick Wagoner, podría anunciar a lo largo del día el resultado de este plan y las cifras concretas de trabajadores que se han acogido, por ahora, a las medidas propuestas por las compañías. La industria de la automoción está sufriendo fuertes desajustes en Estados Unidos. Opina en nuestros foros acerca de la crisis automovilística.