Los motores HCS han hecho historia en la planta valenciana: su producción se inició en marzo de 1976 para dar vida a un "nuevo coche pequeño para Europa", es decir, al Ford Fiesta. Además, se ha montado en el Escort y en el Ka. En este tiempo, se han fabricado un total de 10.555.504 unidades de motores HCS.
Ford Europa concedió a esta planta de motores el galardón Q1 en 1993, un premio que se creó dicho año para reconocer la calidad de sus productos. En 1994, también recibió el premio europeo a la seguridad en el trabajo.
A partir del 30 de septiembre, Valencia alojará la producción de la nueva familia de motores I4 de gasolina, de cuatro cilindros y 1.8 y 2.0 centímetros cúbicos. Según la compañía, estas medidas forman parte de la política de reestructuración que Ford ha planeado para aprovechar al máximo la capacidad productiva de motores en sus plantas del Viejo Continente.