Huracán Burgo

El temporal que azotó Ferrol debido al huracán Gordon dejó los tramos llenos de barro y piedras. En estas condiciones, los vehículos con tracción total eran los favoritos y, entre ellos, el Mitsubishi Lancer de Pedro Burgo, perfecto conocedor del terreno. El gallego no defraudó y se hizo con la victoria.

Huracán Burgo
Huracán Burgo

El año pasado, el Rally de Ferrol volvía a ser puntuable para el Nacional de Asfalto. Pedro Burgo (Mitsubishi Lancer Grupo N) quería brillar en esta prueba, “la de casa", pero motivos familiares le impidieron estar en la salida. Este año, deseaba sacarse la espina y lo ha conseguido de la mejor forma: logrando una clara victoria. La cita de Ferrol, última prueba gallega de esta temporada, era perfecta para que un vehículo de Grupo N, con tracción total, se hiciera con la victoria. El huracán Gordon había dejado los tramos casi impracticables y el barro se acumulaba en la carretera. En estas condiciones, Burgo se hizo con el mejor tiempo en la primera especial y logró nada menos que 15 segundos de ventaja sobre el siguiente clasificado, Alberto Hevia (Citroën C2 S1600). La conducción no era nada fácil y los tramos se cobraron sus primeras “víctimas": Yeray Lemes y Rogelio Peñate (C2 GT) se salieron de la carretera y el tramo tuvo que ser neutralizado. El asfalto se secó ligeramente, pero el barro y las piedras seguían allí y la opinión de los pilotos era unánime: estaban ante el rally más difícil de la temporada. Sólo uno de ellos parecía inmune a las adversas condiciones: Burgo seguía marcando un “scratch" (mejor tiempo) tras otro y aumentaba su ventaja. Los S1600 se recuperaban y empezaban a luchar por un puesto en el podio, dejando al siguiente Grupo N, el de Jorge González “Rantur", en la sexta posición.El asfalto se secó ligeramente, pero el barro y las piedras seguían allí y la opinión de los pilotos era unánime: estaban ante el rally más difícil de la temporada. Sólo uno de ellos parecía inmune a las adversas condiciones: Burgo seguía marcando un “scratch" (mejor tiempo) tras otro y aumentaba su ventaja. Los S1600 se recuperaban y empezaban a luchar por un puesto en el podio, dejando al siguiente Grupo N, el de Jorge González “Rantur", en la sexta posición.Poco antes del reagrupamiento celebrado a mediodía, el joven Manuel Rueda (Renault Clio S1600) marcaba el mejor tiempo en Mandiá—Ferrol, pero una avería le impidió continuar: el rally finalizaba para él, aunque estará presente en Llanes, la siguiente cita del Nacional de Asfalto.Tras Burgo, la lucha era feroz. Fuster y Sergio Vallejo (Clio S1600), segundo y tercer clasificados, estaban separados por una diferencia mínima. Solá, Hevia y “Rantur", algo más alejados, peleaban entre ellos e intercambiaban continuamente sus posiciones. El catalán necesitaba terminar por delante de Fuster si quería conservar el liderato. Finalmente, se vio favorecido por la suerte y recortó de golpe los 18 segundos que le separaban del alicantino: en el octavo tramo, Fuster, que era tercero (acababa de ser adelantado por los hermanos Vallejo), sufrió un problema en la amortiguación y fue superado por Solá. Los planes del piloto de Benidorm se torcían, pues bajaba hasta la quinta plaza.Sin embargo, aún no estaba dicha la última palabra. A falta de un tramo para el final de la prueba, Hevia, cuarto en ese momento, pinchó. Los fantasmas volvían a conjurarse: precisamente, los pinchazos habían arruinado la carrera del asturiano en este mismo rally, un año antes. Fuster y Rantur subían una posición y el alicantino se quedaba a dos segundos de Solá. Había que jugárselo todo en la última especial.Nadie amenazaba a Burgo, que, desde su primer puesto, contaba con más de un minuto de ventaja sobre Vallejo. Éste también tenía una diferencia cómoda respecto a Solá. Aun así, ninguno de ellos bajó el ritmo: lograron el segundo y tercer mejor tiempo en el tramo, en el que el vencedor fue “Rantur". El gallego, que no sacó tanto provecho como su “paisano" de su Mitsubishi Lancer, llegó hasta la tercera plaza y subió al podio. Mientras tanto, Fuster, muy concentrado, lograba arañar un par de segundos al crono y finalizar por delante de Solá, aunque sólo por la mínima. El catalán se quedó en la quinta plaza y, con los puntos obtenidos, consiguió no perder el liderato: ahora lo comparte con Fuster y ya está claro que el campeonato no se decidirá hasta la última carrera.En el podio, la emoción casi impedía hablar a Burgo: el gallego ha logrado su primera victoria absoluta, aunque no le ha servido para ponerse al frente del Grupo N: “Rantur", tercer clasificado, sigue primero en esta categoría, así como en la Mitsubishi Evo Cup. Mención especial merecen los hermanos Vallejo, a los que el segundo puesto casi les supo a victoria, debido a las difíciles condiciones climatológicas y a la remontada que protagonizaron.— El octavo tramo también tuvo que ser neutralizado, debido a un accidente múltiple entre los participantes del Desafío Peugeot. Eloy Entrecanales se salió de la carretera y los coches que llegaron tras él se pararon para avisar del incidente. En otro punto de la especial, Raúl Álvarez también se salió y, al intentar regresar al asfalto, chocó con Miguel Arias.
Josep Basols fue el vencedor en el Desafío Peugeot. El abandono de Entrecanales ha otorgado el campeonato al catalán, que ya es el vencedor de este trofeo monomarca.
Fernando Rico logró el primer puesto en el Trofeo Citroën C2. Armide Martín, que volvía a puntuar en esta categoría, consiguió la quinta plaza.
— Pablo Castelos, que hizo debutar su Ford Fiesta ST, tuvo que retirarse en la sexta especial.
— “Rantur" tuvo algunos problemas con su Mitsubishi Lancer Evo IX: el extintor de su coche se vació en una de las especiales.