1.Cinturón de seguridad
Para que sea eficaz, nunca debe ir flácido, sino lo más tenso posible. Un cinturón mal colocado puede causar heridas internas en un accidente. La parte ventral -que jamás debe situarse sobre el vientre- debes colocarla lo más baja posible, sujetando las caderas y nunca sobre el abdomen. La parte del cinturón que discurre por el tórax debes situarla entre el borde de la espalda y el cuello, justo en el centro de la clavícula. Los reglajes en altura te ayudarán a encontrar la posición ideal.
2.Embarazadas
Si eres mujer y estás embarazada, recuerda que entre el esternón y el centro del volante debes dejar una distancia mínima de 25 centímetros. Por lo tanto, deberías empujar al máximo el asiento hacia atrás para que haya la máxima distancia posible entre tu abdomen y el airbag.
3.Cinturón para embarazadas
Para mayor comodidad y seguridad, utiliza un cinturón especial para embarazada desde los primeros meses de gestación. Son muy sencillos de colocar y puedes llevarlo siempre contigo. De todas formas, consulta con tu médico por si tuvieras un embarazo de riesgo.
4. Los niños
Los más pequeños siempre deben ir en su sistema de retención infantil correspondiente. Pero, además, debes asegurarte que la sillita está instalada correctamente y que el niño está bien atado antes de arrancar. Muchas veces, durante el trayecto, los niños pueden desabrocharse sin que nos demos cuenta. Por eso, vigila de vez en cuando este hecho y, si ocurre, no dudes en parar el vehículo lo antes posible y con seguridad, y volver a abrocharles. Hazles entender que no es un juego.
5.Cunas y cucos portátiles
Siempre deben ajustarse de manera que el extremo de la cabeza del bebé esté situado en la parte más alejada de la puerta, es decir, en la zona del asiento central. De este modo, puede evitarse un golpe directo en la cabeza en un choque lateral. Este tipo de sistemas de retención infantil no está prohibido pero es muy poco recomendable. De hecho, hay muchos modelos en el mercado que no se pueden instalar en los vehículos.
6. Puertas y ventanas
Bloquea las puertas y ventanillas del coche. Muchos vehículos cuentan con este sistema de seguridad. De esta forma evitarás llevarte algún susto durante el viaje, tanto tú como los pasajeros más pequeños.
7. Exposición al sol
Si tu coche no tiene cortinillas en las ventanas traseras, hay un truco que seguro que recuerdas de tus viajes cuando eras niño. Puedes utilizar un trapo para evitar que el sol entre en el habitáculo. Pilla una pequeña parte con la ventanilla, dejando la mayor extensión de trapo por dentro del vehículo.
8.Evita los mareos
Si tus hijos son de los que se marean, recomendamos que no viajen con el estómago vacío. Antes de salir procura que tomen un tentempié ligero, rico en glucosa y que no sea una bebida. Si se marea durante el trayecto, a algunos niños les funciona sacar ligeramente la mano por la ventanilla. Si nada funciona, será mejor que pares, se bajen del vehículo y estiren un poco las piernas.
9. Reglaje de faros
Una carga distinta a la habitual hace que los faros apunten donde no deben, perjudicándote a ti mismo porque no ves lo que tienes que ver, y a los que vienen de frente por deslumbramientos. Así que, tendrás que regularlos correctamente antes de salir y con el equipaje ya cargado. No te olvides de volver a ajustarlos cuando llegues a tu destino y descargues el equipaje.
10. Reglaje de retrovisores
Antes de arrancar el motor, verifica la visibilidad exterior, es decir, el reglaje de los retrovisores. ¿Ves a través de ellos los tiradores de las puertas traseras? El retrovisor central debe completar los laterales y cubrir la totalidad de la luneta trasera.