Objetivo: consumir menos

La eficiencia y la ecología son dos aspectos muy tenidos en cuenta por los fabricantes de coches. Cada una de las marcas denomina a su familia de vehículos eficientes de una forma determinada, pero todas ellas comparten en mayor o menor medida los siguientes recursos técnicos que contribuyen a ahorrar combustible. Esto es lo que hacen los fabricantes de coches para consumir menos.

Objetivo: consumir menos
Objetivo: consumir menos

Toyota Optimal Drive, BMW EfficientDynamics, Seat Ecomotive, Volkswagen BlueMotion Technologies, Volvo DRIVe, Hyundai i-Blue, Skoda Greenline, Ford Econetic... prácticamente todas las marcas de automóviles presentan en su gama comercial una familia ecológica de vehículos de bajas emisiones contaminantes. Las medidas de ahorro más comunes aplicadas por las marcas de coches son las siguientes.La altura rebajada de la carrocería y el sistema de apertura variable de las ranuras de la parrilla delantera del radiador son dos recursos técnicos cada vez más utilizados por las marcas de automóviles. En un vehículo que no cuenta con el sistema de apertura variable de las ranuras de la parrilla delantera del radiador, en todo momento el aire entra por dichas ranuras. Sin embargo, esa refrigeración no siempre es necesaria, por lo que varias marcas ya han ideado sistemas que regulan la apertura y cierre de dichas ranuras. Con este recurso tecnológico, se elimina la resistencia que provocaría el flujo de aire constante a través del radiador. El tema está claro: a mejor aerodinámica, mejor consumo de combustible.El sistema Air Vent Control de BMW es uno de los más conocidos, aunque otras marcas y modelos como el nuevo Ford Focus cuentan con un sistema similar.Michelin, GoodYear, Dunlop, Bridgestone... en definitiva, la mayor parte de fabricantes de neumáticos ya tienen en su gama comercial neumáticos de baja resistencia a la rodadura que aportan su granito de arena en el ahorro de combustible. No te pierdan nuestro reportaje sobre neumáticos ahorradores.Un cambio de marcha en el momento oportuno permite ahorrar mucho combustible. El dispositivo o indicador óptimo de marcha señala, directamente en el campo visual del conductor, la marcha que debería seleccionar para ser lo más eficiente posible. Además, este dispositivo recomienda cómo cambiar a marchas más largas o cortas con más eficacia, basándose en el estilo de conducción que practique quien guía el vehículo.El control total del proceso de inyección garantiza que la mezcla que se obtiene en la cámara de combustión tiene la cantidad justa de combustible, ni una gota más. También el flujo de la mezcla dentro de esa cámara se puede dirigir de forma que, cuando la bujía produzca su chispa, la combustión sea óptima, se produzca inicialmente en un punto determinado y toda la energía obtenida tenga el mejor aprovechamiento posible. El sistema de inyección de alta precisión BMW Hight Precision Injection es un buen ejemplo. Dicho dipositivo envía una mezcla pulverizada de combustible y aire a la bujía en el punto justo donde más rendimiento puede conseguirse. La consecuencia es más refinamiento, mejores prestaciones y menor consumo.El sistema Start/Stop de parada y arranque automático patentado por Bosch apaga automáticamente el motor cuando el vehículo se detiene y se encuentra en punto muerto, y luego vuelve a encenderlo en cuanto el conductor pisa de nuevo el pedal del embrague. El funcionamiento de este dispositivo puede variar según diversas variables, tales como la temperatura exterior, estado de la batería, temperatura del motor, número de veces en un tiempo determinado que se ha activado el dispositivo, etc.A diferencia de los sistemas hidráulicos convencionales, la dirección asistida eléctrica recibe apoyo de un motor eléctrico que asegura el uso de la energía únicamente al maniobrar. Así, sólo se gasta energía cuando se mueve el volante, pero no mientras éste permanece en la misma posición (en una recta, o cuando ya estamos trazando una curva, por ejemplo), ya que en esos casos el motor eléctrico se desactiva.A menor peso total del vehículo, menor cantidad de combustible se necesita para impulsarlo. Es pura física. El reto de construir un vehículo de la forma más ligera posible siempre ha acompañado a la práctica totalidad de fabricantes de coches. Esa especie de lucha contra la báscula afecta tanto a las partes básicas de un automóvil como a los propios elementos de equipamiento (piezas del motor, carrocería, asientos, materiales interiores, caja de cambio, etc.).Cuando el conductor levanta el pie del acelerador o cuando acciona el freno, la energía cinética resultante de ambas operaciones es transformada en electricidad por el generador, que recarga con ella la batería. Como resultado, se reduce la dependencia del motor de combustión de la batería y, con ello, el consumo.El gasóleo entra en la cámara de combustión a una presión muy alta y con una precisión extraordinaria, utilizando tecnología de inyección piezoeléctrica de vanguardia, que permite controlar todo el proceso al milímetro. Con menos combustible se consigue mayor rendimiento y, además, disminuyen las emisiones de CO2.Un desarrollo más largo en las cajas de cambio manuales son otro de los recursos utilizados por las marcas de automóviles en pos de aprovechar al máximo cada gota de combustible. Este recurso técnico tiene defensores y también muchos detractores, puesto quienes han probado vehículos con esta modificación incluida suelen admitir que a bajas velocidades y a bajas revoluciones el comportamiento del coche resulta demasiado 'perezoso', dando la sensación de que el coche se puede calar en cualquier momento -de hecho, se calan con bastante facilidad-.