Kia no quiere quedarse al margen del proyecto de conducción autónoma. Como bien nos comentaba hace unos días Emilio Herrera, director general de Kia en España, “estamos trabajando en ello, pero tampoco queremos ser precursores. A nivel legislativo todavía no hay nada que regule este tipo de conducción, con lo cual, en el momento en que se regule, iremos avanzando más rápido, pero al final yo creo que, no en cinco años, aunque sí más adelante, va a ser la forma más cómoda de viajar”.
En el marco del Salón de CES de Las Vegas ha presentado a su nueva filial, “Drive Wise”, la nueva marca de Kia para la comercialización de soluciones de alta tecnología, que incluye todas las soluciones de ayudas avanzadas a la conducción. El plan de la compañía es lanzar coches parcialmente autónomos de aquí a 2020. Y será en 2030 cuando Kia lance al mercado su primer modelo de conducción autónoma.
En las carreteras el estado de Nevada, Kia está probando sus nuevas tecnologías en un Kia Soul EV (eléctrico) de conducción autónoma equipado de radares láser LIDAR, sensores de diversas clases y cámaras.
Kia está a todo
Actualmente hay toneladas de sistemas de Kia en desarrollo, incluyendo la conducción autónoma tanto ciudad y carretera, según apunta la marca. Estos dos sistemas permiten que el coche se pueda conducir en ciudad y carretera mediante el uso de una serie de sensores, radares y cámaras que analizan el entorno. Sobre la base de las marcas del carril, la posición del coche en la carretera y la del resto de vehículos, estos sistemas permiten una variedad de maniobras que se pueden realizar sin intervención del conductor.
Kia también está preparando el sistema de mantenimiento de carril que monitoriza y sigue exactamente la trayectoria del vehículo que va delante. Además de todo ello, el sistema de parada de emergencia trabaja con el sistema de “supervisión del estado del conductor” para analizar los rasgos del conductor y asegurar de que sus ojos siguen pendientes de la carretera. Si el software detecta que el conductor aparta los ojos de la carretera durante demasiado tiempo, el sistema dirigirá automáticamente el vehículo hacia el carril lateral apropiado y se parará el coche.
También se trabaja en un sistema de estacionamiento autónomo que permitirá al conductor salir del vehículo y dejar que su coche aparque solo mediante órdenes dadas por un reloj inteligente o SmartWatch.