Para la realización del nuevo Smart Fortwo Mercedes ha contado con un nuevo socio, Renault, con el que ha desarrollado en conjunto las gamas Fortwo y Forfour. Nace así un nuevo Smart "de toda la vida" de dos plazas, y se reedita el Forfour, con su clon Twingo en la marca francesa. Esto significa que ambas marcas comparten prácticamente todo, a fin de poder ofrecerte un buen producto a un precio más competitivo y eso, para bien o para mal, salta a la vista. El nuevo Fortwo está plagado de mandos que bien puedes encontrar en cualquier Renault, desde los de las luces hasta la palanca de cambios. Personalmente no lo veo mal, puesto que no por ser de origen Renault son malos, todo lo contrario, pero puedo entender que busques más personalización en un coche de origen Mercedes. Sinceramente, el aumento de calidad tecnológica y funcional que ha tenido esta generación del Fortwo me parece que está muy por encima de esto; ahora es mucho mejor coche y este detalle no es más que un detalle de pérdida de romanticismo.
El nuevo Smart es un par de centímetros más corto que el anterior, pero crece en 10 cm de anchura. Este es el principal cambio que afecta positivamente a la lógica evolución que ha tenido. Ahora tiene la suficiente anchura como para que puedas viajar con tu hombro muy alejado del de tu acompañante. Pero, además, esta mayor anchura ha permitido mejorar considerablemente la estabilidad, con lo que ya no es necesaria un diferencia tan brutal entre el neumático delantero y el trasero para forzar el subviraje para evitar volcar, como ocurría en el anterior. Gracias a esta mayor estabilidad se ha podido ablandar en muelle y amortiguador, con lo que de un coche duro y de amortiguación seca se pasa a un Fortwo con un nivel de confort similar al de un coche normal; se ha perdido esa sensación de estar llevando un coche diferente y se ha ganado en normalidad en la conducción, aspecto que más me ha gustado en esta nueva generación. El coche se comporta mucho mejor en cualquier situación, tanto en curva como en bache, y ahora puedes afrontar con él un uso en carretera que antes era menos apetecible.
Ofrece un diámetro de giro (de 6,95 m) imbatible, que en la práctica rivaliza más con el de una moto que con el de un coche (7,80 m tiene un Toyota IQ, su principal rival que ya no se vende en España). Esto subraya la agilidad urbana que tan famoso le ha hecho, potenciada ahora con el confort de marcha y una dirección de desmultiplicación variable suavemente asistida. Está disponible con dos motores completamente nuevos de 90 y 71 caballos, que varían la cilindrada y la admisión, con turbo el más potente, desarrollados, según ellos, entre Mercedes y Renault. El año que viene añadirá otro de 60 caballos en primavera, además del las versiones Brabus y Cabrio que llegan en junio 2015.
El motor de 71 CV me gustó mucho y creo que es la opción más interesante si no se va a salir de la ciudad, ya que es lo suficientemente ágil para no demandar más. El de 90 CV aporta ese plus necesario para quien haga un tramo de carretera en su camino a la ciudad, su hábitat natural. Ahora de serie ambos motores vienen con el cambio manual de cinco velocidades, algo inédito hasta ahora en un Smart Fortwo, que siempre se asociaba al incómodo cambio automatizado. En opción (a partir de marzo de 2015) queda la caja de doble embrague DCT y seis velocidades, con la que el Fortwo aumenta su nivel de confort ya que desaparece el desagradable cabeceo de las anteriores generaciones gracias a unas transiciones entre marchas realmente suaves. Según me comentó Annette Winkler, CEO de Smart, la elección perfecta para alguien joven es la del Fortwo de 90 CV manual, puesto que cuesta lo mismo que el de 71 CV con el DCT; cuestión de gustos.
Cuenta con hasta 40 combinaciones de color diferentes, por lo que es más configurable que antes. A esto añade una lista de extras más extensa, entre los que se encuentra una pantalla táctil para la consola central o una base en la que puedes conectar tu teléfono móvil y utilizarlo, mediante una aplicación, como el centro de control de todas las funciones del vehículo. El interior es agradable en su diseño, con unos asientos con el reposacabezas integrado más grandes y cómodos. Dispone de nuevos sistemas de seguridad, como el aviso de salida de carril, el control de distancia o el asistente de conducción con viento lateral. Lleva el Start/Stop en todas sus mecánicas, así como el aire acondicionado. Su precio parte de los 11.800 euros y está a la venta desde el 20 de noviembre con los dos motores de 71 y 90 caballos. El cambio automático DCT estará disponible desde marzo de 2015.
