Smart ForTwo Electric Drive

Los 30 kW de su motor eléctrico, una extrema agilidad y una gran maniobrabilidad son las principales virtudes de la segunda generación del Smart ForTwo Electric Drive.

Smart ForTwo Electric Drive
Smart ForTwo Electric Drive

En 2007, el Smart ForTwo eléctrico de primera generación echaba a rodar por algunas ciudades europeas. Algunas administraciones locales y flotas de empresas se ofrecieron para recopilar datos para el Grupo Daimler. Desde noviembre de 2009, ya se viene fabricando la segunda generación y, por el momento, las expectativas son muy buenas porque la producción inicial de 1.000 unidades se ha visto aumentada a 1.500.

Varias ciudades europeas, entre ellas Madrid, van a poner a prueba el Smart ForTwo Electric Drive. Las únicas 45 unidades que llegarán las disfrutarán las administraciones públicas, los ayuntamientos y las flotas de empresas. El régimen de renting es de 4 años con una cuota mensual de 750 euros. No será hasta 2012 cuando esta versión eléctrica pueda ser adquirida por cualquier conductor.

Autopista.es ha tenido el gran honor de poder conducir el Smart ForTwo eléctrico en un banco de pruebas muy exigente: las saturadas calles de Brooklyn (Nueva York).

Gran aceleración, silencioso, divertido y fácil de conducir… el Smart ForTwo eléctrico no se venderá a escala mundial hasta 2012.

Propulsión eléctrica trasera

La batería está colocada bajo el piso del coche, en una posición intermedia entre el eje delantero y el trasero. De esta forma, el espacio del maletero no se ve alterado. Un motor eléctrico de 20 kW –durante unos instantes, puede llegar a alcanzar los 30 kW, unos 41 CV- colocado en el tren posterior es el encargado de moverlo con extrema agilidad.

Arranque silencioso, palanca en posición D y fuerte aceleración al pisar con contundencia el acelerador, éstas fueron nuestras primeras impresiones al subirnos al Smart ForTwo eléctrico. Una dirección rápida y precisa nos ayudaba a esquivar con gran solvencia las dificultadas del tráfico de Brooklyn. A bordo, ningún ruido, sólo el característico ‘silbido’ eléctrico de este tipo de coches.

Baterías diferentes

La primera generación utilizaba una de níquel e hidruro de sodio, mientras que la segunda generación incorpora una de ión-litio con una capacidad de 16,5 kWh y fabricada por Tesla Motors. Con una carga completa, se anuncia una autonomía de unos 135 kilómetros. La corriente eléctrica de cualquier hogar europeo sirve para cargar la batería. En una toma de 220 Voltios, la carga completa se realiza en unas 8 horas, mientras que en unas 3,5 horas habrá un almacenaje del 80 por ciento.

El habitáculo de esta versión eléctrica dista poco de sus hermanos con motor de combustión. Como elementos nuevos sólo encontramos los dos indicadores redondos del nivel de electricidad consumida y de estado de carga de la batería

  • Motor: eléctrico de imán permanente.
  • Potencia: 20 kW con un ‘pico’ de 30 kW.
  • Par motor: 120 Nm.
  • Propulsión: trasera.
  • Batería: ión-litio de 16,5 kWh.
  • Tiempo de recarga completa: 8 horas.
  • Recarga 80%: 3,5 horas.
  • Aceleración 0-60 km/h: 6,5 segundos.
  • Velocidad máxima: limitada a 100 km/h.