Peugeot 207 CC 1.6 HDI 110 CV

Es utilizable en el día a día, gasta poco, cuenta con un motor agradable, un equipo muy completo y es descapotable, qué más se puede pedir a un coche pequeño… seguramente algo más de espacio pues, en la práctica, casi es un biplaza.

Peugeot 207 CC 1.6 HDI 110 CV
Peugeot 207 CC 1.6 HDI 110 CV

En esta ocasión nos hemos subido a la versión Diesel de este pequeño descapotable –también se ofrece con motores de gasolina de 120 y 150 CV–, impulsada por el conocido 1.6 HDI de 110 CV, realizado íntegramente en aluminio. Un motor de muy buenos recuerdos en su predecesor el 206 CC y que, por suavidad y refinamiento, se coloca como uno de los propulsores más agradables que se pueden encontrar en esta categoría. Es muy progresivo desde bajo régimen y ofrece un nivel de prestaciones aceptable para un coche de cierto planteamiento dinámico, como es el 207 CC. Esta versión Diesel pasa de 0 a 100 km/h en 11,6 segundos y, por ejemplo, a la hora de afrontar un adelantamiento en cuarta, necesita 10,2 segundos para pasar de 80 a 120 km/h. Unos registros que se pueden calificar como correctos pero sin ser un coche especialmente veloz.A la hora de circular descapotados se nota el progreso en cuanto a ruido y turbulencias frente a su antecesor. Unas mejoras que no evitan que sigan apareciendo remolinos de aire en la zona trasera –se ofrece un deflector en opción–, aunque rodar a un crucero notable por una autopista no llega a ser demasiado incómodo.A la hora de circular descapotados se nota el progreso en cuanto a ruido y turbulencias frente a su antecesor. Unas mejoras que no evitan que sigan apareciendo remolinos de aire en la zona trasera –se ofrece un deflector en opción–, aunque rodar a un crucero notable por una autopista no llega a ser demasiado incómodo.En cuanto al consumo, un gasto medio que ronda los 6,5 litros se debe considerar bueno, pues no hay que olvidar que en el caso del coupé-cabrio el motor debe tirar de unos 160 kilos extra, si comparamos su peso con el del 207 berlina equivalente.A nivel de seguridad, en el lugar de los reposacabezas traseros lleva dos arcos metálicos extraíbles de disparo pirotécnico, que se activan en 175 milisegundos y se elevan 20 cm para asegurar la protección de los ocupantes en caso de vuelco. Además, la dotación incluye cinco airbag, con uno para proteger las rodillas del conductor.Desde el nivel de equipamiento básico el 207 CC HDI incluye faros antiniebla, retrovisores eléctricos, asientos deportivos, radio-CD en el frontal y ordenador de viaje, pero deja en opción el ESP, el climatizador o los sensores de lluvia y luces que sí se incluyen en la versión Sport que hemos probado. Ésta se distingue estéticamente por una rejilla de entrada de aire pintada en aluminio, la luneta trasera sobretintada, llantas específicas, umbrales de las puertas y conjunto de pedales en aluminio y los relojes con fondo blanco. Y su dotación, muy completa, añade faros direccionales, encendido automático de luces, retrovisores abatibles eléctricamente, espejo interior electrocromo, volante de cuero… Además, su climatizador bizona sabe identificar el paso de coupé a cabrio y, por tanto, adapta el control de las funciones.Por si fuera poco, nuestra unidad montaba además la opción de “cuero integral" en gris claro, pero también se puede solicitar en negro, bitono rojo/negro o marrón. Como opciones más destacadas quedan un kit manos libres bluetooth, el equipo de alta fidelidad JBL o el navegador.Entonces, quien se plantee la compra de un Peugeot 207 de tres o cinco puertas, ¿debería gastarse 3.000 euros más en un 207 CC equivalente? La respuesta debe ser afirmativa si a diario le basta con un coche de dos plazas y si en esos cálidos días de primavera, de otoño o en las plácidas noches de verano está dispuesto a disfrutar del placer adicional que se puede sentir al volante de un cabrio.

LO MEJOR
LO PEOR

– Funcionamiento del techo
– Comportamiento dinámico
– Equipamiento (Sport)

– Espacio plazas traseras
– Maletero descapotado
– Sonido al ralentí

En esta ocasión nos hemos subido a la versión Diesel de este pequeño descapotable –también se ofrece con motores de gasolina de 120 y 150 CV–, impulsada por el conocido 1.6 HDI de 110 CV, realizado íntegramente en aluminio. Un motor de muy buenos recuerdos en su predecesor el 206 CC y que, por suavidad y refinamiento, se coloca como uno de los propulsores más agradables que se pueden encontrar en esta categoría. Es muy progresivo desde bajo régimen y ofrece un nivel de prestaciones aceptable para un coche de cierto planteamiento dinámico, como es el 207 CC. Esta versión Diesel pasa de 0 a 100 km/h en 11,6 segundos y, por ejemplo, a la hora de afrontar un adelantamiento en cuarta, necesita 10,2 segundos para pasar de 80 a 120 km/h. Unos registros que se pueden calificar como correctos pero sin ser un coche especialmente veloz.A la hora de circular descapotados se nota el progreso en cuanto a ruido y turbulencias frente a su antecesor. Unas mejoras que no evitan que sigan apareciendo remolinos de aire en la zona trasera –se ofrece un deflector en opción–, aunque rodar a un crucero notable por una autopista no llega a ser demasiado incómodo.A la hora de circular descapotados se nota el progreso en cuanto a ruido y turbulencias frente a su antecesor. Unas mejoras que no evitan que sigan apareciendo remolinos de aire en la zona trasera –se ofrece un deflector en opción–, aunque rodar a un crucero notable por una autopista no llega a ser demasiado incómodo.En cuanto al consumo, un gasto medio que ronda los 6,5 litros se debe considerar bueno, pues no hay que olvidar que en el caso del coupé-cabrio el motor debe tirar de unos 160 kilos extra, si comparamos su peso con el del 207 berlina equivalente.A nivel de seguridad, en el lugar de los reposacabezas traseros lleva dos arcos metálicos extraíbles de disparo pirotécnico, que se activan en 175 milisegundos y se elevan 20 cm para asegurar la protección de los ocupantes en caso de vuelco. Además, la dotación incluye cinco airbag, con uno para proteger las rodillas del conductor.Desde el nivel de equipamiento básico el 207 CC HDI incluye faros antiniebla, retrovisores eléctricos, asientos deportivos, radio-CD en el frontal y ordenador de viaje, pero deja en opción el ESP, el climatizador o los sensores de lluvia y luces que sí se incluyen en la versión Sport que hemos probado. Ésta se distingue estéticamente por una rejilla de entrada de aire pintada en aluminio, la luneta trasera sobretintada, llantas específicas, umbrales de las puertas y conjunto de pedales en aluminio y los relojes con fondo blanco. Y su dotación, muy completa, añade faros direccionales, encendido automático de luces, retrovisores abatibles eléctricamente, espejo interior electrocromo, volante de cuero… Además, su climatizador bizona sabe identificar el paso de coupé a cabrio y, por tanto, adapta el control de las funciones.Por si fuera poco, nuestra unidad montaba además la opción de “cuero integral" en gris claro, pero también se puede solicitar en negro, bitono rojo/negro o marrón. Como opciones más destacadas quedan un kit manos libres bluetooth, el equipo de alta fidelidad JBL o el navegador.Entonces, quien se plantee la compra de un Peugeot 207 de tres o cinco puertas, ¿debería gastarse 3.000 euros más en un 207 CC equivalente? La respuesta debe ser afirmativa si a diario le basta con un coche de dos plazas y si en esos cálidos días de primavera, de otoño o en las plácidas noches de verano está dispuesto a disfrutar del placer adicional que se puede sentir al volante de un cabrio.
LO MEJOR
LO PEOR

– Funcionamiento del techo
– Comportamiento dinámico
– Equipamiento (Sport)

– Espacio plazas traseras
– Maletero descapotado
– Sonido al ralentí