Nissan lleva tiempo apostando fuerte por los coches deportivos de altos vuelos y además de su exitoso Nissan GT-R, la oferta incluye dos versiones muy especiales, la exclusiva versión Nismo y el especialísimo Juke R 2.0.
Hace ya cuatro años, Nissan desarrollaba el espectacular Juke R tomando como base de partida tanto la mecánica como la mayoría de los elementos mecánicos del Nissan GT-R. El Juke R 2.0 supone una nueva vuelta de tuerca al concepto original, empleándose en este caso la mecánica del GT-R, pero en su versión Nismo, que ofrece más potencia y mayor deportividad.
El Nissan GT-R Nismo se distingue a simple vista por los aditamentos aerodinámicos que incorpora; en la parte frontal se adopta un paragolpes de nuevo diseño, mientras que detrás recibe un alerón de grandes dimensiones capaz de aportar 100 kg de carga aerodinámica a alta velocidad manteniendo, no obstante, un extraordinario CX de 0,26.
En el Nisan GT-R Nismo el V6 de 3,8 litros pasa de 550 a 600 CV. Para ello se adoptan dos turbos de mayores dimensiones idénticos a los que se emplean en las versiones GT3 de competición, también se reprograma la gestión electrónica y se incorpora una bomba de gasolina de mayor caudal, entre otras cosas.
En el Nissan GT-R Nismo también se mejora la suspensión y para ello recibe muelles más duros, una barra estabilizadora trasera de mayor grosor, se modifican los brazos inferiores de la suspensión delantera y se montan amortiguadores Bilstein de tarado más enérgico, si bien estos conservan el control electrónico de dureza variable con tres posiciones a elegir: Confort, Normal y R.
El Nisan Juke R 2.0 se beneficia de los cambios técnicos introducidos en el GT-R Nismo. De esta manera la potencia pasa de los 485 CV originales, a los 600 actuales. Algo parecido ocurre con las suspensiones, que adoptan nuevos tarados y reglajes. Exteriormente el nuevo Juke R 2.0 también cambia; recibe un paragolpes y un capó delantero con entradas de ventilación más grandes para el motor, ambos realizados en fibra de carbono, material que también se emplea tanto en el nuevo paragolpes trasero, como en el espectacular spoiler posterior, ahora de mayores dimensiones. Con todo esto no es de extrañar, que el aspecto exterior del Juke R 2.0 resulte de lo más llamativo y espectacular; un coche con el que es imposible pasar inadvertido.
El Nissan GT-R Nismo no recibe demasiados cambios en el interior, lo que más llama la atención son los asientos de diseño deportivo que incorpora y que además son más ligeros dado que el respaldo está realizado en fibra de carbono, siendo los principales responsables de que el peso total del conjunto se reduzca en torno a 20 kg.
El Nissan Juke R 2.0, por su parte, mantiene el mismo planteamiento de su antecesor; conserva así tanto el salpicadero como el cuadro de instrumentos y la consola central del GT-R, también monta un completo arco de seguridad, arneses de cuatro puntos, mientras que los baquets de competición del modelo anterior, dejan paso a unos asientos de diseño deportivo, más cómodos y que facilitan el acceso al coche. Algo que no deja de sorprender, es que si bien se trata de un automóvil producido artesanalmente, sorprende la excelente calidad de realización y el ajuste de los distintos componentes; tanto es así, que casi podría pasar por un modelo de gran serie.
El Nissan GT-R Nismo, impresiona por lo que corre y sobre todo la facilidad con la que lo hace. Su capacidad de aceleración es absolutamente impresionante y prueba de ello es que consigue pasar de 0 a 100 km/h en tan sólo 2,7 segundos. El motor empuja con una fuerza y un poderío que rompe los esquemas a cualquiera; cuando se pisa a fondo el acelerador la patada es impresionante e instantánea, agotando las marchas en un santiamén. No menos impresionante es la capacidad que ofrecen los frenos y eso a pesar de que el peso en orden de marcha supera ligeramente los 1.700 kg. Estos parecen además aguantar sin problemas el trato más exigente.
El Nissan GT-R Nismo es sorprentemente eficaz a la hora de abordar los virajes. Gracias a los nuevos reglajes de suspensión, se ha ganado en agilidad y rapidez de reacciones. Este deportivo permite una extraordinaria capacidad para negociar las curvas a velocidad de vértigo y la tracción total se muestra el complemento perfecto para administrar con total eficacia la descomunal caballería disponible. De todas formas, el tren trasero tiene mucho protagonismo en la conducción y el comportamiento al límite se asemeja bastante al de un propulsión trasera cuando se descarga la abundante caballería a la salida de los virajes más cerrados, especialmente en el modo R y especialmente si se desconectan del todo las ayudas a la conducción.
El Juke R 2.0 también impresiona por su fabulosa capacidad de aceleración y extraordinarias cualidades dinámicas, si bien es verdad que difícilmente se igualen los 2,7 segundos para acelerar de 0 a 100 km/h del GT-R Nismo, dado que este singular Crossover pesa en torno a 80 kg más. Los 315 km/h declarados en el GT-R Nismo tampoco parecen a su alcance; algo lógico si se tiene en cuenta que la aerodinámica es mucho menos favorable. De todas formas, no cabe duda que el Juke R 2.0 se convierte en el SUV más rápido y deportivo del mundo.
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