Lanzado a finales de 2007, el Jaguar XF representó un primer envite muy serio a las tradicionales berlinas de representación alemanas. Por la mayor exclusividad que ofrecía a nivel de imagen y marca, y por un muy logrado equilibrio general, fue un primer azote que quedó prácticamente a las puertas ya de unos, eso sí, aún superiores Audi A6, Mercedes Clase Ey BMW Serie 5. Intratables hasta esa fecha, estas berlinas empezaron a vislumbrar entonces a un nuevo rival en crecimiento… que hoy da el estirón definitivo. Porque esa Jaguar de entonces no es, ni mucho menos, la de hoy. Es ahora una firma mucho más madura, más avanzada.
Evolucionadísimo como fabricante bajo el paraguas del consorcio multimillonario Tata, el grupo Jaguar-Land Rover echa hoy el resto para tratar de convertirse, segmento a segmento, en algo más que una alternativa premium. Y si últimas novedades como los F-Type o XE nos han dejado ya un gran sabor de boca, la segunda generación del nuevo Jaguar XF bebe ahora de ellos para ser la confirmación definitiva.
Máxima ligereza
Para ello, ingenieros de Jaguar nos aseguran haber perfeccionado esta vez los notables avances que ya han ido mostrando en esos anteriores productos. Y al volante podemos constatarlo. Para empezar, el Jaguar XF parte casi de una hoja en blanco frente a su predecesor, incorporando hasta un 83% de piezas nuevas a partir de la plataforma modular estrenada en el XE y con un elevado contenido de aluminio: material que encontrarás tanto en un monocasco en el que acapara un 75 por ciento, como en capó, aletas, suspensiones, motores y hasta en laterales de la carrocería fabricados en una sola pieza. Una arquitectura que, en combinación incluso con travesaños realizados en aleación de magnesio, le permiten anunciar el menor peso del segmento: es hasta 190 kg más ligero que el XF anterior (un 11%), rebajando, según Jaguar, hasta en 80 kg el peso de sus grandes competidores.
Si ya por su gran ligereza el Jaguar XF debía mejorar su anterior rendimiento, técnicamente es además hoy mucho mejor coche. Ligeramente más corto (4,95 metros totales, 7 mm menos) y más bajo (1,46 metros, 3 mm menos), el nuevo Jaguar XF no sólo es también casi un 30 por ciento más rígido que antes, sino que, optimizado además con nuevas tomas frontales para canalizar el aire sobre las ruedas delanteras, anuncia hoy una aerodinámica muy mejorada: de 0,29 pasa a un Cx de sólo 0,26. Y estéticamente ofrece también una imagen más deportiva y afilada gracias a sus menores voladizos.
Más ágil, más dinámico
Punto y aparte en arquitectura, como también en el chasis. Prometiendo un gran reparto de pesos de prácticamente 50/50, el Jaguar XF monta hoy suspensiones casi completamente nuevas, compuestas por un tren delantero de paralelogramo deformable con un diseño muy similar al del F-Type, con muelles más ligeros y casquillos con revestimiento de teflón, y un eje trasero formado por un más avanzado multibrazo que Jaguar denomina Integral Link y muy parecido al que estrenó ya la berlina media XE. De serie, el nuevo Jaguar XF cuenta con tecnología de amortiguación pasiva (amortiguadores capaces de variar sus fuerzas en función de la frecuencia gracias a una válvula extra en el pistón, y que puede tener tarado Normal o Sport en opción o en las versiones R-Sport) y con el sistema “Torque Vectoring by Braking”, tomado de nuevo del F-Type para controlar mejor el reparto de par en curva.
Más comodidad y agilidad que sientes desde los primeros metros en un Jaguar XF de tacto directo e informativo, y que parece encoger metros por su buen manejo a pesar de seguir siendo algo más grande que sus tres rivales alemanes. Opcionalmente puede completarse en algunas versiones con la amortiguación activa Adaptative Dynamics de Jaguar, capaz de supervisar los movimientos de carrocería y ruedas hasta 100 veces por segundo. Un nivel ya más avanzado de conducción que, junto a la función Configurable Dynamics, te permite adaptar también a la carta acelerador, cambio o dirección para hacer de la respuesta del nuevo Jaguar XF más un Serie 5 que un Clase E, para que nos entendamos. La dirección, por cierto, también es de nueva factura y ya eléctrica en lugar de la anterior hidráulica: ofrece una muy buena precisión de guiado. Tampoco, por supuesto, falta nuevo material fonoabsorbente para dejarnos en carretera un Jaguar XF mejor aislado en la rodadura que, aún sin llegar aquí al nivel de filtrado de Mercedes, sí ofrece el rendimiento que esperas como berlina de representación que es.
Motores más eficientes
Jaguar aseguraba así haberlo mejorado todo, y empezamos a constatarlo. Como también su hoy revisada gama mecánica. Porque el XF estrena ahora los nuevos motores Diesel Ingenium desarrollados íntegramente en aluminio por la marca. De 4 cilindros, con 2,0 litros y distribución variable en escape, en su versión inferior de 163 CV asegura consumir un 24% menos que el anterior 2.2 Diesel, con una reducción también del 17% en sus fricciones internas. Y todo para anunciar un consumo que parte así de sólo 4,0 l/100 km, absoluta referencia hoy en su categoría para conformar, teóricamente ya que aún no había unidades disponibles para poderlo comprobar, la berlina Diesel más eficiente y con menos emisiones de su clase (104 g/km de CO2). Se aprovecha para ello de su gran ligereza y de un depósito de combustible reducido a sólo 55 litros de capacidad.
Por encima, sobre este mismo bloque 2.0 Diesel Ingenium, pero ya con un depósito más convencional de 69 litros, cohabitará una versión con 180 CV de gran rendimiento que sí hemos podido conducir. Aunque algo áspero como ya nos pareció en el XE donde antes se estrenó, ofrece muy buenas prestaciones y un bajo régimen formidable. Ambas motorizaciones pueden ir asociados a un cambio manual de 6 relaciones o al alabado automático de 8 velocidades con el que lo hemos probado, firmado como el manual por ZF y siempre impecable en su respuesta por suavidad y rapidez. También aquí.
Siguiendo en Diesel, el nuevo Jaguar XF completa su oferta con un 3.0 V6, ya con doble turbo, con cambios en su sistema de inyección y una potencia revisada: de 275 CV pasa hoy a 300 CV, subiendo a un excepcional par máximo de 71,4 mkg. Sólo disponible con cambio automático, anuncia un 0 a 100 km/h en 5,8 segundos, con un consumo de apenas 5,5 l/100 km, un 9% menos que antes.
En cuanto a gasolina, el nuevo Jaguar XF abre gama con un pequeño 4 cilindros turbo, de 2,0 litros, completa distribución variable y 240 CV muy refinado y también sólo en automático. Como los dos superiores bloques V6 de 3,0 litros de inyección directa y alto rendimiento tomados en este caso del F-Type, en 340 CV o los 380 CV de la exclusiva y deportiva versión XF S.
Precisamente, hemos tenido también ocasión de probar tanto en el Circuito de Navarra, como por carretera, este nuevo Jaguar XF S. Muy rápido, con una gran estabilidad para su tamaño, buena capacidad de frenada y un motor muy poderoso subiendo hasta las 6.500 rpm de corte, puede que la pista no sea el terreno habitual para semejante berlina, pero se defiende francamente bien en usos no demasiado exigentes.
Además, mientras el resto de la gama sólo está disponible en propulsión trasera, estos dos grandes V6 gasolina pueden elegirse así o también con una tracción total AWD con sistema IDD con la que lo hemos probado en circuito, sistema tomado, una vez más, del F-Type. Trata por tanto siempre de priorizar el comportamiento dinámico como berlina de propulsión, pero, gracias a un embrague multidisco húmedo, desvía par al eje delantero siempre que sea necesario. Y la verdad es que, incluso en un pequeño trazado mojado, nos ha sorprendido por su gran y progresiva motricidad. Para aumentar aún más la capacidad de tracción, el Jaguar XF añade en sus versiones AWD la función Adaptive Surface Response, que sustituye al anterior modo Invierno basándose en la experiencia de Land Rover para determinar la superficie por la que se conduce y modificar la respuesta de dirección, acelerador, transmisión o control de estabilidad. Los modelos de propulsión también cuentan con el nuevo sistema All Surface Progress Control (ASPC), una especie de control de crucero de baja velocidad, activo entre 3 y 30 km/h para enfrentarse a superficies muy deslizantes mientras el conductor sólo se preocupa del manejo del volante.
Más espacio y tecnología
Más dinamismo y eficiencia, pero también más amplitud. De hecho, de puertas a dentro, Jaguar asegura también que el XF será la berlina de su segmento con mayor espacio para las piernas traseras. Sus ingenieros aseguran haberlo conseguido gracias a una distancia entre ejes que aumenta 51 mm (2,96 metros totales), para ofrecer entre 15 y 24 mm más de habitabilidad que antes. La fila posterior puede plegarse en proporción 40:20:40, facilitando la carga de objetos tan voluminosos como esquís, mientras que el maletero (con 540 litros de capacidad oficial) dispone ahora de función de cierre automático en opción. Hasta que no pase por nuestro Centro Técnico no podremos cuantificar el salto, pero desde luego espacio no falta en la nueva berlina británica.
Mucho espacio que se completa, como siempre, con la exclusividad habitual de Jaguar. En el XF no faltará de nuevo el selector desplegable rotatorio del cambio de marchas, las salidas de climatización abatibles o la cuidada iluminación ambiental táctil que siempre le han distinguido, aunque ahora mejora todo el habitáculo con nuevos materiales y acabados, pero, sobre todo, con mayor carga tecnológica y de conectividad. Al sistema estándar “InControl Touch” con pantalla táctil capacitiva de 8 pulgadas de serie, el XF suma ahora en opción por primera vez el más avanzado “InControl Touch Pro”, ya con pantalla de 10,2 pulgadas, procesador de 4 núcleos, disco duro sólido, tecnología de red Ethernet o función Dual View para que el conductor pueda, por ejemplo, seguir la navegación mientras los acompañantes ven la TV o el DVD. Lo hemos podido ver en fase de producción e impresiona, pero no llegará al mercado hasta dentro de unos 3 meses.
En el nuevo Jaguar XF tampoco falta hoy un moderno cuadro de instrumentos con pantalla TFT de 12,3” personalizable, Head Up Display por láser, faros Full LED adaptativos (primer Jaguar que los monta) ni los últimos sistemas de asistencia que, mediante cámara estereoscópica, incluyen frenada autónoma, asistentes de carril y ángulo muerto, limitador de velocidad inteligente o asistencia al aparcamiento. Todo para conformar un avanzadísimo Jaguar XF que estará disponible en nuestro mercado desde finales de septiembre o principios de octubre en 5 acabados: Pure, Prestige, R-Sport, Portfolio y S. Sin duda, el rival más fuerte que encontrarán ahora mismo en el segmento Audi, BMW y Mercedes.
Precios Jaguar XF 2016
XF 2.0 Diesel 163 CV: entre 43.004 y 48.948 euros.
XF 2.0 Diesel 180 CV: entre 44.421 y 53.569 euros.
XF 3.0 Diesel 300 CV: entre 66.176 y 69.910 euros.
XF 2.0 GTDi 240 CV: entre 54.448 y 61.587 euros.
XF 3.0 340 CV: entre 66.368 y 77.339 euros.
XF S 3.0 380 CV: entre 75.479 y 81.313 euros.
