BMW X3 2.0d

El motor 2.0d de 177 CV viene a corregir una relación peso/potencia que en el anterior BMW X3 2.0d de 150 CV condicionaba el dinamismo que se le presume a todo BMW.

BMW X3 2.0d
BMW X3 2.0d

El mayor brío mecánico no implica haber descompensado el aguante del bastidor. De hecho, lo más destacable de este X3 es su excelente comportamiento en carretera. Vaya por delante que la unidad que hemos probado contaba con la suspensión deportiva opcional y neumáticos de mayor anchura. Con esta configuración, los movimientos del X3 son de precisión relojera. En realidad copia el perfil de cualquier BMW, pero tratándose de un SUV, con altura y peso relativamente elevados, es gratificante sentir cómo dibuja trayectorias y simula reacciones de muy buena berlina. Todo BMW minimiza tolerancias y flexiones en aras de que una acción de su conductor, se convierta en una reacción del coche de inmediato. Con esto, su tren delantero muestra una instantaneidad de respuesta increíble y los apoyos de la carrocería son de una inmediatez y solidez sorprendentes para el tipo de coche de que se trata. También hay que decir que como contraprestación, su capacidad de absorción es menor y sus reacciones sobre baches son muy enérgicas, comprometiendo el confort. Y aunque a cambio transmita mucha confianza por lo fácil y asentado con que se mueve, con esta configuración el X3 (y otros muchos BMW) puede pasar por ser un coche también algo exigente si no nos concienciamos de su deportividad. Independientemente de la suspensión elegida, su eficacia en situaciones ad-versas está por encima de estos matices. Recordemos que su tracción es integral permanente con un reparto inicial del 60 por ciento hacia el eje trasero y un 40 por ciento sobre el delantero. El sistema varía automáticamente el reparto de par en función a la motricidad de cada eje e incluso puede detectar una situación de subviraje o sobreviraje y mandar más par al eje adecuado para inducir una corrección de la maniobra, antes de que entre en acción el control de estabilidad. En definitiva, este BMW mima a los conductores con ciertas dotes al volante, que entienden la conducción como algo más que dirigir un coche. Por campo, sin ser un especialista ni pretenderlo, su tracción y altura libre le permite sortear con mucha solvencia obstáculos y trayectos más allá del imprevisto. Como dotación específica cuenta con un control de descenso que facilita bajar pendientes deslizantes sin necesidad de actuar sobre los frenos. Por lo demás, el X3 resulta un vehículo con un alto grado de calidad y tecnológico, que lo transmite al tacto y a la vista en todos los apartados. En algunos casos, su cantidad tecnológica es a base de elegir opciones que apunta a lo más avanzado de la industria. Esta política de opciones también lleva a encontrarnos algunas carencias de serie, por lo que el precio final de un BMW y de casi todas las marcas Premium casi nunca se corresponde con el coche que nos esperamos. En cualquier caso, el X3 es un coche con múltiples posibilidades de uso, de tamaño adecuado para la ciudad y excelentes maneras como coche familiar y con muy buena prestancia en cualquier tipo de carretera.— Posibilidades de uso
— Comportamiento en carretera
— Calidad percibida— Comodidad sobre baches
— Detalle de equipamiento

Motor avanzado
El mayor brío mecánico no implica haber descompensado el aguante del bastidor. De hecho, lo más destacable de este X3 es su excelente comportamiento en carretera. Vaya por delante que la unidad que hemos probado contaba con la suspensión deportiva opcional y neumáticos de mayor anchura. Con esta configuración, los movimientos del X3 son de precisión relojera. En realidad copia el perfil de cualquier BMW, pero tratándose de un SUV, con altura y peso relativamente elevados, es gratificante sentir cómo dibuja trayectorias y simula reacciones de muy buena berlina. Todo BMW minimiza tolerancias y flexiones en aras de que una acción de su conductor, se convierta en una reacción del coche de inmediato. Con esto, su tren delantero muestra una instantaneidad de respuesta increíble y los apoyos de la carrocería son de una inmediatez y solidez sorprendentes para el tipo de coche de que se trata. También hay que decir que como contraprestación, su capacidad de absorción es menor y sus reacciones sobre baches son muy enérgicas, comprometiendo el confort. Y aunque a cambio transmita mucha confianza por lo fácil y asentado con que se mueve, con esta configuración el X3 (y otros muchos BMW) puede pasar por ser un coche también algo exigente si no nos concienciamos de su deportividad. Independientemente de la suspensión elegida, su eficacia en situaciones ad-versas está por encima de estos matices. Recordemos que su tracción es integral permanente con un reparto inicial del 60 por ciento hacia el eje trasero y un 40 por ciento sobre el delantero. El sistema varía automáticamente el reparto de par en función a la motricidad de cada eje e incluso puede detectar una situación de subviraje o sobreviraje y mandar más par al eje adecuado para inducir una corrección de la maniobra, antes de que entre en acción el control de estabilidad. En definitiva, este BMW mima a los conductores con ciertas dotes al volante, que entienden la conducción como algo más que dirigir un coche. Por campo, sin ser un especialista ni pretenderlo, su tracción y altura libre le permite sortear con mucha solvencia obstáculos y trayectos más allá del imprevisto. Como dotación específica cuenta con un control de descenso que facilita bajar pendientes deslizantes sin necesidad de actuar sobre los frenos. Por lo demás, el X3 resulta un vehículo con un alto grado de calidad y tecnológico, que lo transmite al tacto y a la vista en todos los apartados. En algunos casos, su cantidad tecnológica es a base de elegir opciones que apunta a lo más avanzado de la industria. Esta política de opciones también lleva a encontrarnos algunas carencias de serie, por lo que el precio final de un BMW y de casi todas las marcas Premium casi nunca se corresponde con el coche que nos esperamos. En cualquier caso, el X3 es un coche con múltiples posibilidades de uso, de tamaño adecuado para la ciudad y excelentes maneras como coche familiar y con muy buena prestancia en cualquier tipo de carretera.— Posibilidades de uso
— Comportamiento en carretera
— Calidad percibida— Comodidad sobre baches
— Detalle de equipamiento
Motor avanzado