Cuando se presentó hace ya 5 años, el Volkswagen Up! disponía de tres posibilidades mecánicas que se basaban en un mismo bloque tricilíndrico de 999 cm³ con potencias de 60, 68 -GNC- y 75 CV. Por aquel entonces, mucho antes de entrar en vigor la normativa de homologación anticontaminante EURO VI, las prestaciones que ofrecían esas versiones de gasolina parecían suficientes para el tipo de utilización que se le presuponía a un vehículo urbano. Incluso permitían un razonable dinamismo en carretera con una correcta utilización del cambio.
Hace ahora ya unas semanas, en el restyling del Volkswagen Up!, se incorporó también una versión turboalimentada sobre el mismo bloque de motor, que parecía innecesaria para la mayoría de conductores. Sin embargo, lejos de la realidad, una vez probadas las actuales variantes de 75 y 90 CV de potencia, esta última sobrealimentada queda como la opción más lógica debido al agrado de uso que ofrece y a la merma prestacional que ha experimentado la versión de 75 CV atmosférica respecto al modelo originario. No se trata de algo subjetivo, sino de mediciones que ponen en evidencia la necesidad de ciertas modificaciones –desarrollos de cambio alargados- para la homologación con la actual norma. Y que en la práctica deja al motor de 75 CV con un insuficiente nivel prestacional incluso, en ocasiones, para uso urbano.
Un claro ejemplo de esta diferencia en las prestaciones del Volkswagen Up! es el tiempo empleado en el adelantamientos: de 80 a 120 km/h en 4ª y 5ª velocidad, el modelo turbo de 90 CV emplea 9,99 segundos y 14,53 s, mientras que el atmosférico de 75 CV necesita 25,02 segundos y 47,68 s. Como podéis ver, la diferencia es abismal, y esto se traduce en que el más potente presenta una linealidad y progresividad extraordinarias mientras el “pequeño” atmosférico necesita circular continuamente en 3ª velocidad si queremos un mínimo de dinamismo.
Volkswagen Up!: sus consumos reales
La primera consecuencia de esto último en un aumento de consumo real del Volkswagen Up! de 75 CV con respecto al turbo de 90 CV, conformándose éste ya con 5,07 l/100 km de media por 5,81 l/100 km el del 75 CV. Incluso en uso urbano consume algo más el atmosférico: 0,3 l/100 km más… concretamente.
Respecto a lo que ofrece este nuevo Volkswagen Up! por comportamiento en carretera y confort de marcha, es justo decir que no admite crítica teniendo en cuenta el segmento al que pertenece, siendo el modelo urbano que mejor equilibrio presenta en este sentido, con permiso de Seat Mii y Skoda Citigo… que son sus hermanos gemelos.
Teniendo pues en cuenta el equilibrio entre nivel dinámico y consumo real, los 720 € que tiene de sobreprecio la versión turboalimentada de 90 CV del nuevo Volkswagen Up!, frente a la atmosférica de 75, se pueden considerar un coste reducido debido a la gran diferencia existente entre ambos a favor del más potente en todos los aspectos. En su día, las versiones de 60 y 75 CV sin turbo nos parecieron más que razonables, pero la realidad es que los modelos de la actual gama han perdido mucho agrado de conducción por sus desarrollos de cambio exageradamente largos para ese tipo de motor. Sin duda, la versión más recomendable es el 1.0 TSI 90 CV, ya que los otros no permiten circular con facilidad sin recurrir continuamente al cambio ni siquiera en vías de circunvalación urbana.
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