En un panorama en el que las marcas buscan soluciones más eficientes a la movilidad con los tradicionales motores térmicos, con híbridos y eléctricos como los más recurrentes en la actualidad, o los de algún tipo de propulsión mediante gas –GLP o GNC–, o los de pila de combustible –tecnología aún por llegar–, el Grupo PSA Peugeot Citroën parece haber dado un paso adelante en el desarrollo de un modo de propulsión alternativo.
Con una mecánica híbrida de gasolina y aire comprimido, Citroën será la encargada de presentarla mundialmente en el Salón de Ginebra sobre un C3 VTi de 82 CV. No es novedoso, ya que se ha visto anteriormente en algunos prototipos como el AIRPod MDI, pero sí que apunta a convertirse en el primer modelo de producción del mercado, allá por 2016 cuando se prevé su llegada.
En colaboración con empresas de la talla de Faurecia y Bosch, que han participado en el desarrollo de la parte hidráulico-neumática del C3 Hybrid Air, Citroën promete con éste una mejora del 45 por ciento en términos de consumo de combustible y de emisiones de CO2 en ciudad. De esta manera, el consumo se marca en 2,9 litros a los 100 kilómetros, mientras que las emisiones de CO2 se cifran en 69 g/km, un tercio menos que en el modelo de gasolina equivalente.
A los costes de ahorro en este sentido habrá que sumarles el hecho de que se trate de una tecnología con bajos costes de fabricación y mantenimiento, por lo que promete ser económicamente accesible una vez que llegue a producción y, convertirse así, en una alternativa de fuerza a los eléctricos que no terminan de ganar en protagonismo. Además, el sistema podrá montarse en otros modelos del Grupo PSA, incluso en los vehículos comerciales, partiendo de variantes más o menos potentes –en el caso del motor térmico– en función del tamaño del modelo en el que se monte.
El sistema Hybrid Air de PSA combina un motor de gasolina, un motor hidráulico movido por aire comprimido, dos depósitos de almacenamiento del aire comprimido y un cambio automático con tren epicicloidal, prescindiendo de esta manera de las baterías típicas de los eléctricos. El sistema de gestión inteligente de este híbrido permitiría escoger, a gusto del conductor y de sus necesidades, entre tres modos de funcionamiento: sólo con aire comprimido –de manera totalmente limpia, sin emisiones de CO2–, sólo con el motor térmico y en modo combinado, sumándole además el sistema de recuperación de energía en frenadas y deceleraciones.
El Citroën C3 Hybrid Air que conoceremos en el Salón de Ginebra podría funcionar exclusivamente con aire comprimido durante el 60 y el 80 por ciento de su marcha en ciudad, mientras que su autonomía podría ser un 90 por ciento mayor gracias a los depósitos de aire comprimido.