Se nos hace difícil imaginar un coche que haya levantado tanta expectación en los últimos años. Tras convertir al Tesla Model S en un habitual de las grandes ciudades y con el objetivo de entrar en el mercado SUV con su Model X, la compañía se puso entre ceja y ceja construir el coche eléctrico que dé el empujón definitivo al mercado allí donde aún no se haya asentado, el Tesla Model 3.
Sus primeros datos dejaron claro que podía ser un digno aspirante a convertirse en ese coche con el que sueñan desde la marca, un compacto con prestaciones de Premium y un precio más asequible que los Model S y X. Tanto es así que su atractivo precio de partida de 35.000 dólares en Estados Unidos, sin contar las ayudas por tratarse de un coche eléctrico, ha provocado un colapso en la fábrica que ha obligado a un nuevo retraso.
Una de las últimas noticias que tenemos es que Elon Musk ha rebajado las cifras de producción del nuevo Tesla Model 3 a la mitad. De esta manera, el magnate de la marca asegura que durante el primer trimestre de 2018 se fabricarán 2.500 unidades semanales y que a finales de junio se alcanzarán 5.000 vehículos semanales saliendo de sus instalaciones. En un principio, se esperaba alcanzar estas 5.000 unidades semanales a finales de marzo.
Compacto eléctrico al nivel de un BMW M3
Sin embargo, aquellos que están en la lista de espera de Tesla y no creen ver la luz al final del túnel pueden estar tranquilos. Las primeras pruebas externas a la marca han señalado que el Model 3 acelera más rápido de lo que se aseguraba en Tesla. DragTimes, expertos en sacar el máximo partido a cada modelo, han comprobado que la versión más prestacional del compacto rebaja en medio segundo las cifras oficinales, alcanzando los 96 km/h (60 mph) en 4,66 segundos, por los 5,1 segundos que anunciaba la marca.
Además, desde BMW Club of America se ha hecho hincapié en que el comportamiento del Tesla Model 3 está más cerca del BMW M3 que del Serie 3. Alex McCulloch, uno de sus articulistas habituales, se ha puesto a los mandos del Model 3 de un amigo. Y sus sensaciones no han podido ser mejores. McCulloch ha señalado que el Tesla Model 3 es “comunicativo, tiene aplomo y es sorprendentemente neutro. La dirección, los frenos y el balance general es que está, según mis expectativas, muy cerca de un BMW M3 E46”. Además, cierra el artículo destacando que a un “enamorado del BMW M3” como él le ha encantado el Tesla Model 3.
Parece que llegan buenas noticias para aquellos que tienen una larga lista de espera por delante.
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