Porsche ha apostado decididamente por la hibridación, con un planteamiento de ésta como instrumento para ofrecer la mayor deportividad manteniendo la posibilidad de rebajar el consumo. Es lo que han bautizado como E-performance y presidió el desarrollo del nuevo Porsche Cayenne E-Hybrid, el Cayenne híbrido de segunda generación, enchufable, más potente, rápido, eficaz y con mayor autonomía eléctrica que el anterior.
El nuevo Porsche Cayenne E-Hybrid anuncia una potencia máxima de 462 CV, nacida de la unión de su motor V6 de 340 CV y uno eléctrico de 100 kW —un 43% más potente que el primero—, con un par máximo de 700 Nm disponibles al primer golpe de acelerador. Su estrategia híbrida, de hecho, es compartida con la del ya mítico Porsche 918 Spyder, con el motor eléctrico empujando en todos los modos de conducción en la arrancada para garantizar la mejor puesta en marcha y su administrando potencia en función del modo seleccionado. Los más deportivos: Sport y Sport Plus llegan a aprovechar al máximo la capacidad de la batería para almacenar y proveer energía. En Sport se crgaría al máximo para cuando haga falta un momento de propulsión extra, en tanto que en el modo Sport Plus el motor de gasolina carga la batería tan rápido como sea posible predisponiéndola a vaciarse también al máximo, como cuando se busca una máxima aceleración (5 s en el 0-100 km/h). Su opuesto, el modo exclusivamente eléctrico permitiría una velocidad máxima de 135 km/h y una mejor autonomía de 44 km (42 dependiendo de la monta de neumáticos) que le permite cumplir con los requisitos para conseguir la certificación de emisiones cero según las pegatinas ecológicas de la DGT.
El sistema híbrido del Porsche Cayenne
La batería del Porsche Cayenne E-Hybrid es de litio, de 14,1 kW, va situada bajo el asiento posterior y se encuentra refrigerada por líquido, lo que ayudará a mantener su integridad tanto en momentos de uso intenso como al conectarse a una toma de corriente. Una doméstica, de 10 amperios la recargaría en algo menos de 8 horas y sin duda hará muy popular a la opcional de 7,2 kW con conexión Mennekes que podría llegar a cargarla en poco más de dos horas con un suministro de 32 amperios. Todo el proceso podrá ser gestionado desde el PCM (Gestor de comunicación Porsche) y una aplicación específica que, entre otras cosas, permitirá ajustar calefacción y aire acondicionado con el motor apagado, encontrar estaciones de carga e incluso gestionar el pago del suministro eléctrico sin necesidad de darse de alta en cada uno de los proveedores.
El tren de rodaje del Cayenne E-Hybrid es nuevo, con el motor eléctrico conectado ahora mediante un embrague electromecánico de nueva factura que asegura mejor tiempo de actuación y la asociación más eficaz a la caja de cambios Tiptronic de ocho relaciones. Ésta no sólo es más rápida en arrancada, sino que proporciona unos cambios de marcha más rápidos, con menores pérdidas en las transiciones y, en definitiva, un comportamiento más deportivo.
La tracción sigue siendo integral, con un embrague central multidisco de control electrónico que distribuye el par entre los dos ejes dependiendo de las necesidades de la conducción para ofrecer el máximo de dinamismo, confort o capacidad todoterreno, supervisado por el sistema de gestión activa de la suspensión PASM, equipado de serie.
El precio y equipamiento opcional del Porsche Cayenne
El Porsche Cayenne híbrido enchufable se sitúa justo por encima del Cayenne básico, por debajo de los más deportivos S y Turbo y con 93.309 euros se puede constituir como la opción más racional de la gama habida cuenta de su valor añadido. Este precio, en cambio será un punto de partida al que habrá que sumar elementos como el sistema eléctrico de estabilización del balanceo PDCC (control dinámico de chasis Porsche), las llantas de hasta 22”, el interesante cargador rápido, el Head Up Display en color o el paquete Porsche InnoDrive de ayudas a la conducción.
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