Land Rover LRX

Tiene tracción total, una posición de conducción más elevada de lo normal y una herencia estética que te dice “Land Rover" en muchos detalles clave. Lo llaman Land Rover LRX y es la defensa de Land Rover ante los nuevos SUV y otros “intrusos" en el todo-terreno.

Land Rover LRX
Land Rover LRX

Cuando lo tienes delante, te quita el hipo. Sin embargo, del Land Rover LRX se diría que es anti-olímpico. Nada de “más grande, más fuerte…", como mucho, “más lejos".

El arranque se controla desde un dispositivo ipod.

El LRX Concept que ahora se presenta en Ginebra es una segunda evolución del prototipo blanco que Land Rover presentó en enero en el Salón de Detroit y, a partir del cual, debería inspirarse el próximo modelo de la marca, mucho más pequeño de lo habitual, con imagen de todo terreno, pero con un frontal mucho menos agresivo que los todo terreno al uso. Lo decimos en condicional, pero a la carrocería del LRX apenas hay que quitarle algún apósito, reforzar el pilar central o colocar un parabrisas convencional, en lugar de éste que desborda los montantes, para estar ante el todo terreno más rompedor y atractivo de los concesionarios.

Teóricamente esta revisión llega con el objetivo de mostrar a Europa las posibilidades de personalización del futuro LRX, que también debería facilitar su uso en campo. Así, la segunda versión presenta una carrocería muy agresiva en color negro, adornada por ligeros detalles de aluminio y por un techo plateado coronado por barras para soportar tablas de snowboard y diverso material deportivo, y un panel de fibra de carbono.Decíamos antes que el LRX Concept también llega “más lejos" porque su compacidad supone un peso menor, su tamaño a la baja una mejor aerodinámica y, en definitiva, menor consumo y mayor autonomía. El LRX ha sido concebido para contar con un sistema de propulsión híbrido, compuesto por un motor turbodiesel de 2,0 litros de cilindrada (capaz de alimentarse por biodiesel) y un sistema eléctrico integrado conocido como "Electric Rear Axle Drive" (ERAD) encargado de mover el eje trasero. Este motor eléctrico puede funcionar exclusivamente sin intervención del motor Diesel hasta una velocidad máxima de 32 km/h o conjuntamente con el motor de combustión.Con este conjunto híbrido, el LRX Concept asegura una reducción de consumo de un 30 por ciento con respecto a otros 4x4 de similar tamaño y potencia. Land Rover anuncia, por tanto, un gasto medio de sólo 4,7 l/100 km y unas potenciales emisiones de CO2 de 120 g/km, lo que le permitiría en España quedar exento del Impuesto de Matriculación.Bienvenidos a los nichos de mercado dentro de otros, a los coches inclasificables. ¿De qué otra manera se puede despertar el deseo que ofreciendo algo único, que se sale de todos los patrones? Si te gusta el BMW X6, pero no tienes ni el dinero ni un garaje suficientemente grande, tu alternativa podría estar en este Land Rover LRX o como se llame si termina pasando a la serie.Por supuesto que el X6 o el Ssangyong Actyon no son rivales “de ley", pero eso no le quita valor al LRX. Otra escala, otro precio… y sólo dos puertas: un Land Rover de planteamiento deportivo pugnando con una marca de deportivos pasados a formato de todo terreno.Las piezas básicas del LRX no extrañarían a nadie. La base es un Freelander 2, con las mismas vías y con la misma distancia entre ejes. Las ruedas parecen salirse del paso de ruedas, pero no, se trata de unas de 20 pulgadas, una dimensión de la que se disponen en opción en el Freelander. “Yo no creo que se vaya más allá de ese tamaño en llantas de serie", nos comenta Julian Thomson, el actual responsable de diseño avanzado de Land Rover. Las mismas ruedas ya te dejan claro que no es un coche de orientación todo-terreno, y la distancia al suelo es reducida, “pero por supuesto, tendrá un comportamiento fuera de la carretera superior a cualquier competidor", nos aseguran. No en vano todos los coches de Land Rover se ponen a punto en la pista de pruebas de Gaydon y, de una manera u otra, tienen que conseguir pasar por ella. Y hay que ver la magnitud de los pedregales, que ya quisieran para sí incluso los parques de atracciones más intrépidos.En su versatilidad en campo contarán con las ventajas de su tamaño, con unos voladizos muy pequeños, porque la longitud ha menguado 10 cm respecto al Freelander. Además del centro de gravedad rebajado, las vías han aumentado en 3 cm respecto a la versión de origen, por lo que la resistencia al vuelco habrá mejorado también. Además, y junto a su tracción a las cuatro ruedas, contaría hipotéticamente con otros sistemas ya conocidos en Land Rover, como el control de descensos o el dispositivo "Terrain Response", capaz de ajustar la tracción a las diferentes superficies de circulación.El LRX Concept que se muestra en Ginebra confirma sus dimensiones compactas: 4,35 metros de longitud, 1,90 mk de ancho y sólo 1,53 m de alto. Por lo tanto, es más corto y bajo que un Freelander 2.No hay marca que quiera seguir viva que no lance variantes de aspecto campero para su catálogo. “Nosotros inventamos el todo terreno los primeros, hace ya muchos años", nos comentan con cierta sorna. De lo que se trata es de sacar ventaja de una situación que algunos verían delicada. Si los compradores encuentran seductor el coche con imagen todo-terreno, ellos piensan que es el momento de que estos profesionales del coche TT “salgan a pescar" en ese río revuelto. Por supuesto, la mayoría de los clientes a los que va dirigido el LRX no se habrían planteado hace diez años un todo-terreno. Qué mejor manera de sacar al comprador-tipo de las “viejas berlinas" que ofrecerles una dosis dual, a la vez coupé y a la vez campera… y a sacar valor de la marca Land Rover. Aunque eso ya lo harán otros dueños de la marca, no la actual propietaria, Ford.La línea descendente del techo, sus 7,5 centímetros menos de altura que un Freelander y las tres puertas configuran un coupé, pero a pesar de lo que pueda sugerir la línea ascendente de la cintura, hay espacio para alojar adultos de estatura superior a la media en las plazas posteriores. Al menos, en este concepto con su techo transparente, que rebaña así unos centímetros al carecen de revestimiento. Si los más bajitos se pueden sentir algo oprimidos por no ver a través de las ventanillas, seguro que en cambio agradecerán que la segunda fila de asientos va más elevada de lo normal, herencia de la marca.Estéticamente puedes encontrar reminiscencias diversas, pero la “superposición" de gruesos bloques de chapa destilan aire Range Rover. Los trabajados grupos ópticos, ahora que vendrá la luz de día y con los LED en pleno auge, constituyen la nota más rompedora. El resto, completamente nuevo, han conseguido que parezca familiar. Y si no, herencia genética, como el maletero estilo primer Range, con un acceso mediante dos hojas, la superior integrando la luneta y la inferior con enrase con el piso para facilitar la carga. Más nostálgicos, sus diseñadores nos dicen que es para poder tomar algo en el campo oficiando de banqueta, para lo que han colocado estratégicamente posavasos y un soporte para un termo. A cualquiera se le ocurren otros usos, porque lleva una nevera detrás y los altavoces posteriores están articulados y pueden orientarse para sacar su potencia sonora a través del portón abierto: fiestas improvisadas a la vista y botellón … pero de champán. El LRX no olvida los guiños a la naturaleza con unas alfombrillas elaboradas con lana, aunque a modo de sandwich con material resistente intercalado, o también con unos revestimientos de techo de un tacto que recuerda el tejido Alcantara elaborados a partir de botellas de plástico PET reciclado.Del interior del LRX apenas nos quedaríamos con sus principales trazos, como un salpicadero muy tendido, más o menos como el de un Range, esa parte de su esencia de la marca. Destaca la presencia de una espina central que, como inició Audi en el TT, querían que dejase ver cierto carácter estructural. La misma intención se demuestra en los asientos, con un exoesqueleto a la vista, que permite lucir una original cinemática de plegado. La intención de generar una simbiosis con el conductor es patente con la aplicación de las últimas tecnologías en iluminación, con guías de luz en las alfombrillas o luz indirecta de color rojo, azul o verdes según el modo de tracción elegido en un selector giratorio. Obviamente, el verde corresponde al modo “eco", que todavía no se ha definido, pero que bien podría corresponder a la variante sólo-eléctrica de la motorización híbrida. En la consola central todo gira alrededor de un ipod, empezando por el motor, porque el arranque se activa desde su pantalla táctil. De ahí se toman las canciones, pero también los gustos personalizados del conductor y la regulación de los diversos parámetros de la conducción. Por supuesto, cuenta también con una instrumentación convencional, aunque no tanto. Se combinan agujas y retroiluminación para presentar una imagen futurista.Muy prometedor, pero nosotros nos quedamos con el envoltorio. Seguro que, tal y como nos lo han enseñado, con muy pocos cambios, su exterior despertará pasiones en más de uno. Suficiente para aumentar considerablemente los 10.000 coches vendidos con los que espera Land Rover terminar el año en España.