Audi Q7 V12 TDi

Si te das una vuelta por Ginebra, no faltes a la cita con el Audi Q7 V12 TDI, simplemente, por ver 'in situ' el motor Diesel de turismo más grande del mundo.

Audi Q7 V12 TDi
Audi Q7 V12 TDi

Pequeños se han quedado los V8 y V10 actuales de la competencia y de la misma Audi, frente a los valores del nuevo 6.0 V12 de gasóleo: 500 CV y 102 mkg son, simplemente, valores difíciles de asimilar en un motor Diesel y en un SUV. No en vano, anuncia una aceleración de 0 a 100 km/h de 5,5 segundos… para pedir paso a más de un deportivo de renombre. 'El mismo V12 TDi del Q7 lo conocimos en Detroit en el superdeportivo de la marca, el R8, que también estará en Ginebra con el apellido de Le Mans y un exclusivo color rojo -lo puedes ver en la foto debajo de estas líneas-. Será, como poco, el más atípico y sorprendente deportivo del Salón. Con los mismos 500 CV y 102 mkg y, aproximadamente, la mitad de peso del Q7, el R8 V12 TDi anuncia una aceleración de 0 a 100 km/h de 4,2 segundos y una velocidad máxima de 300 km/h. Por descontado que a la hora de repostar será el más rápido'.No sabemos nada de los consumos de este gigante Q7 con corazón de gasóleo, imaginamos que relativamente contenidos, pero sí que cumple la norma EU5 sobre emisiones de escape que entraría en vigor en 2010. Su sistema de inyección por conducto común trabaja a una elevadísima presión de 2.000 bar (como los conjunto bomba-inyector) y cada bloque de cilindros cuenta con su propio turbo de geometría variable y filtro de partículas.La caja de cambios elegida es la Tiptronic de 6 velocidades, que combina un modo automático y uno manual secuencial.Lógicamente, esta versión ha pasado por un intenso trabajo de puesta a punto de su bastidor. Las suspensiones neumáticas de control electrónico son de serie y parten de leyes deportivas para compatibilizar los kilogramos y los caballos de potencia de semejante automóvil. Ofrece tres programas adaptativos con la posibilidad de aumentar la altura libre de la carrocería 20,5 cm para incursiones por campo, que también lo puede hacer este Q7.Para las llantas se recurre a lo más grande del catálogo Audi, 20 pulgadas, y en su interior dan acogida a discos de frenos cerámicos, la opción más lógica previniendo el infernal trabajo al que pueden estar sometidos. En cualquier caso, la marca anuncia una durabilidad cuatro veces mayor (calculada en 300.000 kilómetros) que unos equivalentes discos de acero. La imagen del V12 TDi también tiene tintes propios: por fuera destaca una parrilla diferente y los faros de día formada por una hilera de leds. Por dentro, recibe aplicaciones de fibra de carbono y de aluminio, al margen que el equipamiento de serie se nutre de la larga lista de opciones de la gama. A modo de concepto también se puede ver en Ginebra una versión muy especial de este mega Q7 denominada Coastline. Esta versión recibe un color blanco exclusivo, así como unos materiales más lujosos para definir un interior que busca recrear la atmósfera de un yate.