El Ford Mustang cumple años

En Autopista.es hemos querido repasar de forma breve la historia de uno de los iconos de la carretera: el Ford Mustang. Objeto de culto en Estados Unidos, te mostramos los datos más interesantes de este automóvil. En 2009, el caballo salvaje continúa galopando, y de qué manera, con la versión GT500 con motor 5.4 V8 de 540 CV.

El Ford Mustang cumple años
El Ford Mustang cumple años

Más de nueve millones de unidades vendidas. Éste es un éxito comercial del que pueden presumir muy pocos automóviles en el mundo, y más, si dicho coche es un deportivo. Estamos hablando del Ford Mustang, uno de los modelos de la márca del óvalo más vendido, sólo superado por el Ford T y el Ford Fiesta.

El Ford Mustang fue uno de los principales representantes de los denominados ‘pony cars’, que daría lugar al subgénero ‘muscle cars’ (coches de alto rendimiento) de las décadas de los 60 y los 70. El Chevrolet Camaro, el Dodge Charger y el Pontiac GTO fueron tres de sus rivales.

El pasado 17 de abril de 2009, el caballo en pleno galope (éste es el emblema que ha lucido el Mustang en su frontal) cumplió 45 primaveras. Desde el diseño original, realizado por Joe Oros y presentado por primera vez en el Salón de Nueva York de 1964, se han puesto a la venta cinco generaciones.

Dos años antes de su debut en la muestra neoyorkina, en 1962, se presentó el Mustang I Concept. El diseño de este prototipo poco tuvo que ver con el modelo definitivo. Un año después, en 1963 aparece el Mustang II Concept, éste sí sería casi un fiel reflejo de la versión original de 1964.

Esta primera generación incluía versiones con motores V6 y V8, además de una de las variantes más atractivas para el público, como la Shelby GT500 presentada en 1967 con propulsor V8 de 355 CV. A esta primera etapa también pertenecen ediciones especiales ilustres como Boss, Mach 1, California Special o Cobra Jet.

'El granjero de Texas', éste es uno de los sobrenombres con los que fue conocido el ex piloto Carroll Shelby, una persona que no sólo destacó en el mundo de la competición, sino también como empresario automovilístico al creando la Carroll Shelby Motors. En 1962, presenta su primer Cobra CSX 2000 y cuatro años después, Ford Motor Company ya le había pedido que fuese el encargado de diseñar las versiones más pasionales y deportivas de su Mustang. Además del agresivo diseño y de un motor de altas prestaciones, las dos franjas de distinto color del capó y del techo se convertirían en uno de los distintivos estéticos para diferenciar a las versiones Shelby de las otras variantes del Mustang. Las primeras de estas variantes fueron la Shelby GT350 y la Shelby GT500, ésta última con motor V8 428 Cobra Jet. Esta versión pasó a denominarse en 1968 como King of the Road (1968 Shelby GT500 KR).

La segunda generación (1974-1978) del Mustang estuvo dominada por la actualidad económica del momento. Los responsables de Ford, al igual que la práctica totalidad de la industria automovilística, se vieron obligados a desarrollar motores de menos peso, menor cilindrada y, sobre todo, que consumieran menos. La razón: la famosa Crisis del Petróleo de 1973 que se prolongó durante los años siguientes. Con el Mustang II, se estrena nueva plataforma, la Arizona, que sustituye a la original Falcon de la primera generación.

Al principio, hubo quien pensó que Ford no desarrollaría motores V8 para el Mustang (se lanzó el nuevo V8 302, de ‘sólo’ 130 CV y combinado únicamente con una transmisión automática), pero finalmente sí lo hizo, junto a versiones de cuatro cilindros y seis cilindros. Se continúan presentando más y más variantes, entre ellas, el Mustang Cobra II en 1976.

En 1979, Ford decide presentar la tercera generación del Mustang. Tomó la plataforma técnica Fox, inicialmente desarrollada para otros modelos como el Ford Fairmont y el Mercury Zpehyr. Respecto al Mustang II, el de tercera generación dio un estirón en todas las dimensiones. Los entusiastas de este automóvil criticaron el cierto aire europeo en el diseño del Mustang III.

Se vendió originalmente en versiones de carrocería coupé y cinco puertas. Hubo que esperar a 1983 para que se presentara su versión descapotable. Poco después, en 1986, aparecía el primer Mustang con motor de inyección electrónica, que daría lugar en 1987 al propulsor 5.0 V8 de 225 CV. Poco después, se crea la división especial de vehículos deportivos –denominada Special Vehicle Team- que, llevaría en 1993 a la aparición del Mustang SVT Cobra con motor V8 5.0 de 235 CV.

Durante esta tercera generación, la prensa filtró presuntos planes secretos de Ford: desarrollar un nuevo Mustang basado en la plataforma de un coche japonés, un Mazda MX-6 o un Mazda 626. Esto significaba que el caballo salvaje podría ser un tracción delantera, además del posible peligro de la continuidad de los motores V8. Finalmente, los responsables de la marca del óvalo desistieron y dieron prioridad a la tradición: el Mustang tenía que seguir siendo un propulsión trasera y, además, tener súper versiones V8.

Ford se sigue basando en la plataforma Fox en la cuarta generación. Es la parte estética la que más cambia en el Mustang IV respecto al III. En cuanto a propulsores, se siguió utilizando el motor de 5 litros, pero ahora con 215 CV. En 1996, este propulsor se sustituye por un 4.6 también de 215 CV y que subiría a 225 CV en 1998 (en los años siguientes, con nuevas versiones de hasta 260 CV). La versión hatchback desapareció y sólo se comercializaron las variantes coupé y cabrio.

En 1996 apareció nuevamente el Mustang Cobra, con motor de 4,6 litros y 305 CV. Pero ésta no sería la versión más potente, ya que en el año 2000 los especialistas de SVT desarrollan el Mustang Cobra R III con motor 5.4 y 385 CV, que se combina con una caja de cambios manual de seis velocidades (la primera vez que un Mustang monta un cambio de este tipo). En 2001, y como claro homenaje a la legendaria película de Steve McQueen, Ford crea la serie especial Mustang Bullitt GT, con el mismo color verde oscuro del coche del film (un Mustang 390 GT de 1968).

Volver a los orígenes. Ésta fue la máxima que tuvo Ford cuando decidió lanzar la quinta generación. El Mustang V se presentaba con un diseño retro que recordaba al de finales de los 60, pero eso sí, con numerosos detalles futuristas. El entonces Vicepresidente de Ford, J. Mays definió su estética como ‘retro-futurism’.

Respecto al capítulo mecánico, el Mustang se lanzó al mercado con dos motores: un V6 4.0 de 202 CV y un 4.6 V8 de 300 CV. Pero estos dos propulsores no serían los únicos, ya que poco después, en 2006, Ford presenta el Shelby Cobra con motor 5.4 V8 sobrealimentado de 32 válvulas y 500 CV (también conocido como Shelby GT500).

Sin embargo, a principios de 2009 en el Salón de Detroit, Ford presentó una nueva versión del Shelby GT500 de 540 CV a 6.250 rpm, tanto en variantes Coupé como descapotable.

El Ford Mustang 2010, disponible en el mercado estadounidense a partir de esta primavera, reúne, según sus máximos responsables tres cualidades: tradición, potencia y un nuevo valor añadido, mayor cuidado por el detalle y calidad en los interiores.

El caballo salvaje ha galopado durante 45 años y Ford pretende que siga siendo el auténtico ‘King of the Road’.

Un coche de película