¿Son los coches los únicos culpables del efecto invernadero?

El vicepresidente de la Comisión Europea y responsable de Industria, el alemán Gunter Verheugen, alertó ayer contra la tendencia a "criminalizar" a la industria del motor por sus consecuencias medioambientales.

¿Son los coches los únicos culpables del efecto invernadero?
¿Son los coches los únicos culpables del efecto invernadero?

El vicepresidente de la Comisión Europea y responsable de Industria, el alemán Gunter Verheugen, alertó ayer contra la tendencia a "criminalizar" a la industria del motor por sus consecuencias medioambientales.

En el debate en el Parlamento Europeo sobre las nuevas propuestas para reducir las emisiones de dióxido de carbono (CO2) de los automóviles, Verheugen subrayó que ésta es "una de las pocas industrias donde la UE detenta el liderazgo a nivel mundial" y que resulta clave para sustentar el mercado laboral europeo.

"Me resisto a que se cree en la opinión pública la idea de que es criminal conducir un automóvil", añadió el comisario, que, en los últimos meses, ha mantenido un pulso con su colega de Medio Ambiente, Stavros Dimas, sobre al alcance de las obligaciones que debe asumir este sector en la lucha contra el cambio climático.

Como resultado de ese debate, la Comisión Europea ha propuesto reducir a 120 gramos por kilómetro la media de emisiones de CO2 para 2012 de los automóviles -frente a los 160 gramos actuales-, aunque darán cabida a reglas más flexibles que permitan superar ese umbral a los coches más pesados.

La propuesta ha suscitado críticas de patronales y gobiernos en Alemania, Francia e Italia, aunque en sentido divergente. Mientras Berlín cree excesivas las sanciones previstas para los constructores que vulneren los límites de emisiones, Italia y Francia creen que la propuesta beneficia a las marcas alemanas especializadas en vehículos de alta gama y gran peso.

Verheugen respondió contundentemente a las críticas formuladas por el presidente francés, Nicolas Sarkozy, aludiendo al impacto ambiental que tienen los "châteaux", las lujosas y enormes viviendas rurales habituales en la campiña francesa. "Si es inmoral conducir un coche grande, es igualmente inmoral vivir en una gran casa unifamiliar en vez de una ‘vivienducha’ que cueste menos de calentar", argumentó el vicepresidente de la Comisión Europea.

Recordó que, además de las normativas ambientales, la industria comunitaria ya afronta el coste adicional de nuevas leyes punteras en materia de seguridad, y alertó de que, si el coste es excesivo, las empresas acabarán trasladando sus fábricas fuera de la Unión."El saldo para el medioambiente no va a ser positivo, aparte de que vamos a perder decenas de miles de trabajos", aseveró Verheugen.

El Parlamento Europeo votará hoy un informe no vinculante sobre las propuestas de recortes de emisiones de CO2. Con el apoyo de los grupos del Partido Popular Europeo, Socialista y Liberal, y la oposición de Los Verdes, el ponente, el liberal alemán Jorgo Chatzimarkakis, pide que se suavicen los recortes de forma que el promedio de emisiones se fije en 125 gramos por kilómetros y el horizonte temporal se retrase a 2015.