El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha anunciado la puesta en marcha de un sistema automático de control de las infracciones de tráfico. Este sistema, que tardará ocho meses en empezar a funcionar, permitirá que todas las infracciones que registren radares, cámaras y sistemas de control de velocidad media sean enviadas de manera inmediata y automáticamente a un Centro Nacional de Tratamiento de Denuncias Automáticas, que se va a ubicar en León.Todos los sistemas de detección de infracciones estarán conectados con el centro mediante fibra óptica y telefonía móvil GPRS. Posteriormente, y también de manera automática, las denuncias serán enviadas a los domicilios de los infractores.Este sistema automático trabajará los 365 días del año y procesará la información sobre las infracciones de tráfico sin mediación de los agentes. En sus primeros 18 meses contará con capacidad para detectar y registrar 3 millones de denuncias. Cuando esté operando a pleno rendimiento, su capacidad será de cuatro millones de denuncias al año. En 2004, último año con estadísticas oficiales, se formularon 2,5 millones de denuncias.“Los conductores deben saber que, en un plazo de ocho meses, la más avanzada tecnología vigilará el cumplimiento de la normativa de tráfico y aquellos que cometan una infracción tendrán una denuncia automática que quedará registrada en el más avanzado sistema informático", explicó Rodríguez Zapatero durante la presentación de un proyecto ferroviario en León.El presidente del Gobierno afirmó que la lucha contra la siniestralidad en las carreteras es “una prioridad política del Gobierno" y que el rigor en la persecución de las infracciones es “un elemento esencial" en materia de seguridad vial. Junto a los radares, se están probando nuevas tecnologías para la vigilancia de las carreteras. Los sistemas de control de velocidad media, que ya están instalados en algunas ciudades, permitirán que se registre la velocidad en tramos de carretera y también se pretende controlar la distancia de seguridad entre vehículos o la disciplina de los conductores en semáforos y señales de stop. En el centro, que se instalará en León, se van a invertir 45 millones de euros. En él trabajarán 120 personas en dos turnos todos los días del año para agilizar la gestión de la información recibida.
Una de las principales razones para poner en marcha este proyecto ha sido el atasco existente en muchas jefaturas provinciales de tráfico para gestionar el ingente número de infracciones, multiplicado con la instalación de cada vez más radares y con la entrada en vigor del carné por puntos. Este sistema automático y centralizado podrá terminar con ese atasco y homogeneizar criterios. El Estado se asegurará así de que ninguna infracción se quede sin denunciar. Es decir, aumentará la recaudación. Este sistema, que ya tiene precedentes en países como Francia, Holanda y el Reino Unido, recibirá información de los puestos fijos y no eliminará la presencia de las patrullas de la Guardia Civil en las carreteras. Los agentes de la Benemérita seguirán controlando los más de 300 radares móviles que existen, detectando los excesos de velocidad y notificando a los infractores la denuncia.Las reacciones no se han hecho esperar al anuncio de José Luis Rodríguez Zapatero. Desde el Real Automóvil Club de España (RACE) se considera que esta iniciativa “responde más a un objetivo de gestión interna de sanciones, una optimización de recursos y a una mejora de la política recaudatoria, frente al necesario objetivo de mejorar la formación y la prevención, elementos esenciales, a medio y largo plazo, para la reducción de la siniestralidad en las carreteras". Además, el RACE considera que, con la automatización de las denuncias, “se pierde la labor educativa de la sanción, que no es otra que explicar en el momento de la infracción los riesgos que entraña su comportamiento, no sólo hacia él, sino hacia el resto de usuarios de la vía". El RACE concluye que la creación de este Centro “mejorará la gestión sancionadora, pero, en ningún caso, ayudará a reducir las víctimas en carretera". Desde Automovilistas Europeos Asociados (AEA), su presidente, Mario Arnaldo, valora al respecto que "sigue siendo más eficaz la presencia de policía en las carreteras que todos los radares juntos", en declaraciones realizadas a Autopista.es.
Desde esta asociación se considera que esta medida es una más encaminada a "disfrazar el fracaso del carné por puntos". Arnaldo considera que es más prioritario cumplir "promesas" como la de incrementar cada año en 1.000 efectivos el número de policías en las carreteras o informar de los efectos de la instalación de nuevos radares en el número de accidentes.
Esta medida, en opinión del presidente de AEA, "es una copia de la aprobada en Francia". Y siendo así es importante mejorar la gestión, pues, según las manifestaciones de Arnaldo, en el país galo el 30 por ciento de las fotos no se pueden tramitar por ser defectuosas y el 25 por ciento de las denuncias van a la basura por no poder localizar al infractor.
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