Este es el panorama que hoy ha dibujado el presidente de la Asociación Española de Renting de Vehículos (AER), Agustín García, en la inauguración de la IV Convención Anual del sector, que este año se celebra con el título ‘La experiencia del cliente es la mejor inversión’.
Según García, la crisis les ha afectado durante estos últimos años, pero parece que el sector ya empieza a subir y la ‘deja atrás’.
Ha recordado que, en términos de flotas, el punto más álgido se registró en septiembre de 2008, cuando se alcanzaron las 580.000 unidades, mientras que el más bajo fue en diciembre de 2013 cuando se situaron en 401.000, lo que representa una caída del 31 por ciento.
En la actualidad la flota de renting en España es de 403.000 vehículos, ha añadido García, para quien es notable el retroceso que hay y que supone estar a niveles de 2004.
No obstante, ha resaltado que el sector espera volver al crecimiento de nuevo, no a los ritmos de ejercicios pasados cuando la flota se aumentaba en unas 50.000 unidades al año, pero sí es posible un volumen anual de unas 20.000. Al respecto, el presidente de AER ha indicado que este año la previsión de crecimiento es del 3 por ciento.
En cuanto a las matriculaciones, ha explicado que en su evolución ha existido correlación con el comportamiento del volumen de las flotas.
El punto más alto de las matriculaciones de renting fue en 2007, cuando se llegó a 203.000, mientras que el más bajo fue en 2009, con 96.000, ha asegurado. Ahora la cifra que registra el sector es de 142.000 unidades matriculadas.
De esta cifra ha precisado que hay que separar, para ser transparentes, los destinados a alquiler a corto plazo sin conductor (rent a car), que cada vez están teniendo más peso frente a las flotas de las empresas, que es la ‘actividad típica’ de las compañías de renting y en la que se incluyen muchos más servicios.
En 2011 -según García- el 15,35 por ciento de la flota de renting iba destinado a alquiler sin conductor, en 2012 ese peso ha crecido al 22 por ciento y en 2013 ha ascendido al 38 por ciento.
Este último ejercicio es por tanto el punto más álgido, pero para 2014 AER prevé que el canal de rent a car vuelva a incrementarse (hasta el 34 por ciento) y que el de empresas baje al 66 por ciento.
En matriculaciones el alquiler a corto plazo mantiene su peso en el 18 por ciento, mientras que el de las empresas cae por efecto de los planes de incentivos a la compra de automóviles PIVE (acaban de agotarse los fondos destinados a su sexta edición y los fabricantes están a la espera de que el Gobierno los prorrogue hasta finales de 2014) que van dirigidos principalmente a los particulares. Estos últimos también están adquiriendo cada vez más peso, ha detallado el presidente de la asociación.
La previsión que maneja la AER es que pasen del 44 por ciento de 2011 al 53 por ciento en 2014, mientras que las empresas bajarán del 38 por ciento de 2011 al 29 por ciento del actual ejercicio.
Esto para Agustín García es preocupante, pero también ‘una realidad’ que refleja que la base de vehículos de empresas en España es más baja que en otros países europeos.
La cuota de penetración que en España tiene el canal de empresas va creciendo del 29,29 por ciento de 2011 al 32,5 por ciento de 2014.
‘Nos gustaría tener el 100 por ciento’, ha reconocido García, quien ha recordado que hay otras figuras como es la financiación tradicional que impiden llegar a ella, lo que no es impedimento para seguir mejorando.