Renault reconquista Nürburgring. Vídeo

7 minutos, 54 segundos y 36 décimas. Ese es el tiempo conseguido por el Mégane RS275 Trophy-R y con el que Renault recupera el récord de vuelta rápida al trazado norte del circuito de Nürburgring. El Mégane es así, oficialmente, el coche de tracción delantera de producción más veloz que jamás haya pisado el Nordschleife

Luis Miguel Vitoria. Twitter: @luismivitoria

Renault reconquista Nürburgring. Vídeo
Renault reconquista Nürburgring. Vídeo

Cuatro segundos. Esa es la diferencia de tiempo que el Mégane RS275 Trophy-R pilotado por Laurent Hurgon ha conseguido respecto al Seat León Cupra que, en manos de Jordi Gené y el pasado mes de marzo, se alzaba como rey de Nürburgring.

 

Hoy, con ese binomio Hurgon-Mégane RS275 Trophy-R, Renault recupera para sí el trono que estaba en su poder desde 2011, cuando ya lo consiguiera, también con el piloto francés a los mandos, el Mégane RS Trophy. Tres años atrás el cronómetro quedó congelado en 8 minutos 7 segundos y 97 décimas.

 

Nürburgring, el juez

Los 20.832 m y las 73 curvas del viejo trazado de Nürburgring se han convertido en una suerte de O.K. Corral donde Seat y Renault se miden —y a no mucho tardar, presumiblemente con un tercero en discordia, Honda con el Civic Type R—para determinar quién hace los modelos de tracción delantera y fabricados en serie más rápidos.

 

Y si el arma de Seat es el León Cupra dotado del Performace Pack que incluye frenos Brembo y llantas de aleación de 19" con neumáticos Michelin Pilot Sport Cup 2; la de Renault es un Mégane aún más especial.

 

De hecho, el RS275 Trophy-R del récord es una versión derivada del Trophy-R «a secas» —ambas fabricadas en la factoría de Renault de Palencia y que serán perfectamente adquiribles en los concesionarios de la marca— aún más aligerada de lo que ya lo está esa edición especial respecto a un RS275 Trophy con el que ambas comparten el motor: un 2 litros sobrealimentado de 273 CV (201 kW), conseguidos a un régimen de 5.500 rpm.

 

Un RS275 Trophy-R todavía más especial

Renault Mégane, récord en NurburgringDe serie, el RS275 Trophy-R equipa el chasis Cup con un diferencial de deslizamiento limitado, una línea de escape de titanio fabricada por Akrapovic y unos amortiguadores de la sueca Öhlins, los Road&Track con tecnología de válvula de doble flujo y ajustables manualmente, además de las Pilot Sport Cup 2 de Michelin en llantas de 19", ruedas que por si mismas permiten casi rebajar ¡6 segundos por vuelta!. En el eje delantero de los Trophy R está otra de las innovaciones que hacen muy especial a estos Mégane: unos muelles de composite, también valiosos en la batalla contra el peso que emprendieron los ingenieros de Renault.

 

Junto otras tareas tales como el cambio de llantas, la sustitución de los asientos originales de los RS275 Trophy por unos de policarbonato firmados por Recaro, la eliminación de la banqueta trasera o fonoaislantes.

 

Pero para lograr hacerse holgadamente con el récord aún era necesario algo más y eso se conseguía con la inclusión en el coche de Hurgon de algunos accesorios que estarán disponibles para cualquier comprador de este modelo, tales como los discos de dos materiales —aluminio y acero— o una batería de iones de litio que sustituye a la de plomo y aún más ligera —nada menos que 16 kilos—. También con la eliminación de la climatización o el R-Link.

 

Con todo este trabajo, y aún cuando se mantuvieron los 273 CV originales, el RS275 Trophy-R del récord conseguía reducir 101 kilos respecto a un RS275 Trophy. Dejar muy lejos los 8 minutos, tal como presumía el hashtag de Renault Sport en twitter, #under8, estaba así al alcance de este Mégane.