RACC: el carné por puntos no es suficiente

El Real Automóvil Club de Cataluña (RACC) es partidario de tomar medidas complementarias al carné por puntos para evitar que este permiso pierda su efecto positivo y aumente el número de muertes, como ha ocurrido en el pasado mes de agosto.

Los médicos, contra los puntos negros
Los médicos, contra los puntos negros

En un comunicado emitido ayer, el club automovilista muestra la preocupación por el aumento de las víctimas de accidente de tráfico en agosto, calculado en un 7,6% respecto al año pasado, si bien argumenta que en la mayoría de los países de la UE el número de muertos está aumentado de forma notable mientras en España, en los primeros ocho meses del año, asegura que se han reducido un 10%. El RACC insiste en que el efecto positivo del Permiso por Puntos puede estancarse si no se aplican ya las imprescindibles medidas complementarias. Se corre el riesgo, advierte, de no ser debidamente apreciado por la opinión pública y estancarse si no se aplican las imprescindibles medidas judiciales y de vigilancia policial que lo complementan.

Además de estas medidas, el club automovilista catalán, considera necesario trabajar en la mejora de las infraestructuras, la señalización y en la renovación del parque móvil para apoyar la eficacia del Carné por Puntos.

Sobre agosto, el RACC hace la salvedad de que el mismo mes de 2006, sobre el que se comparan los 269 muertos registrados este año, "fue excepcionalmente bueno: como se observa en el gráfico adjunto, la cifra de agosto del 2006 fue prácticamente la mitad de la que se había registrado apenas tres años antes, siendo así la segunda mejor marca en agosto de la última década.

El club catalán propone acelerar la reforma del Código Penal e impulsar una revisión de la señalización vial para favorecer un mejor cumplimiento de los límites de velocidad establecidos.

Esta revisión es especialmente importante en los tramos de transición entre zonas urbanas e interurbanas, donde en muchos casos hay cambios bruscos de los límites máximos de velocidad permitidos.También propone un incremento y mejora del despliegue de la Guardia Civil de Tráfico y de las Policías Autonómicas responsables del tráfico para aumentar la probabilidad de que las infracciones sean detectadas.

Propone el RACC que la recaudación por multas de los radares sea vinculada directamente a medidas que mejoren la seguridad vial, al objeto de evitar que exista la percepción de que los radares son usados como un mero instrumento recaudatorio.

El RACC considera urgente, además, poner en marcha un plan para la reducción de los "puntos negros" de las carreteras y un aumento de la inversión en mantenimiento y conservación de carreteras para reducir los tramos de concentración de accidentes, con atención prioritaria a las vías no desdobladas, porque según las estadísticas oficiales las carreteras convencionales concentran el 71 por ciento de las víctimas mortales.

Sobre los radares, el Club propone su reubicación en tramos de alta concentración de accidentes, que según los datos de EuroRAP, se encuentran en las vías no desdobladas, que concentran el 71 por ciento de las víctimas mortales.

De las propuestas forman parte los incentivos fiscales para la mejora de la seguridad del parque automovilístico y la incorporación efectiva e inmediata de los contenidos relacionados con la seguridad vial al currículum escolar, en particular en la asignatura de Educación para la Ciudadanía.

El club catalán pide, finalmente, la puesta en marcha de una autoridad coordinadora en el ámbito de la seguridad vial, con el debido rango político y administrativo, que actuando a modo de autoridad única, asegure que hay un enfoque integral de la seguridad vial y que existe plena coordinación y unidad de acción entre los distintos ministerios implicados: Interior, Fomento, Sanidad, Justicia, Educación, etc.