Lo que sí nos ayuda a reducir el consumo

La evolución en el mundo del motor ha sido una constante en los últimos años. Prácticamente todas las marcas de coches han desarrollado sistemas y fórmulas que optimizan al máximo el aprovechamiento de cada gota de combustible, más ahora con la creciente importancia de los híbridos y dentro de poco, de los eléctricos, los cuales aún no terminan de despegar por los múltiples inconvenientes que aún han de afrontar (Ver Reportaje la Viabilidad del coche eléctrico).Además de sistemas específicos, cada marca ha puesto especial atención en dos factores claves en la fabricación de un automóvil: la aerodinámica y el peso. Un coche ligero y con una baja resistencia al aire utilizará menor cantidad de combustible por kilómetro para desplazarse. Por ello, ambos apartados son dos de los campos donde más pruebas se realizan y donde más investigaciones se llevan a cabo. Búsqueda de materiales resistentes pero cada vez más livianos y continuos tests en los túneles del viento son dos de las premisas básicas que tiene en cuenta cada fabricante antes de lanzar un nuevo automóvil. Pura física.El camino por ser el más eficiente también ha llevado a continuos desarrollos técnicos. Te citamos los más relevantes, muchos de ellos aplicados de forma real en un gran número de automóviles que se venden en la actualidadEn el capítulo mecánico, el peso total del conjunto vuelve a ser una de las claves, de ahí que buena parte de las marcas hayan recurrido a reducir la cilindrada de los motores y, por tanto, incorporar propulsores cada vez más compactos y ligeros. En pos de que las prestaciones y el rendimiento no se vean perjudicados, estos motores de baja cilindrada recurren a la sobrealimentación, ya sea mediante un turbo, un compresor o con ambos a la vez –caso de los TSI de Volkswagen-. Este fenómeno, conocido como ‘Downsizing’, está cada vez más extendido, llegando también a los motores Diesel –en la mayoría de los casos, se recurren a propulsores por conducto común de inyección directa-. En gasolina, además del citado ejemplo del Grupo Volkswagen, también son destacables los motores T-Jet del Grupo Fiat, los nuevos Turbo de General Motors –el conocido 1.4 Turbo del nuevo Opel Astra, por ejemplo- y los nuevos EcoBoost de Ford.Pero además del propio propulsor en sí y de las últimas evoluciones de motores –el Grupo Fiat, de nuevo protagonista con sus recientes (MultiAir-, todas las marcas de coches ponen especial cuidado desde la primera tuerca hasta la última. Por ello, las investigaciones son constantes en otros elementos técnicos como los sistemas de escape, los tipos de dirección, los sistemas de refrigeración, bombas de aceite… en definitiva, en cualquier elemento que interfiera en la distribución de la energía de un coche y en la pérdida de la misma. Bluemotion de Volkswagen, Eco2 de Renault, DRIVe de Volvo, Ecomotive de Seat, TDI-e de Audi, EcoDynamics de Kia, Econetic de Ford, Blue Drive de Hyundai… varios son los nombres que utilizan las marcas de coches para denominar a sus coches más ahorradores y eficientes. Start/stop, Stop/start, Auto Start/stop, Idle Stop&Go (IDG)… varias son las denominaciones para referirse al mismo sistema de parada y arranque automático del motor que en su día inventó Bosch y cada vez más frecuente tanto en coches con motores de gasolina como en vehículos Diesel. Es en recorridos urbanos donde es más efectivo este sistema, con una reducción del consumo en estas circunstancias por encima del 10 por ciento en la mayoría de los casos. Incluso deportivos del calibre del BMW M3 se han ‘rendido’ a la efectividad del Start/Stop. La práctica totalidad de las versiones eficientes suelen incorporar diversos ajustes en la caja de cambios. En la mayor parte de los casos, se decide alargar los desarrollos de determinadas marchas y esto se produce tanto en cajas de cambios manuales como en automáticas. También conocidos como neumáticos de baja fricción. Los Energy Saver de Michelin, los Ecopia de Bridgestone, los EcoContact de Continental… todos los fabricantes de neumáticos comercializan determinados modelos que ayudan ligeramente a reducir el gasto de combustible. No obstante, un buen consejo para todos los automovilistas: un neumático con baja presión hace que aumente el gasto de combustible.Un óptimo manejo de la caja de cambios, conducir en marchas largas siempre que sea posible, anticiparse ante los imprevistos del tráfico (anticipación en la conducción), colocar bien el equipaje, tener al día las revisiones y el mantenimiento técnico del automóvil… todos estos trucos y consejos pueden ayudarte a ser un conductor cada vez más eficiente y, por tanto, a que visites con menos frecuencia las gasolineras. Pincha en el siguiente enlace, trucos y recomendaciones para ahorrar combustible, y te convertirás en un eco-conductor.